Se dice que en nuestro país vive una enorme cantidad de haitianos (se calcula muy empíricamente que son más de un millón). La inmensa mayoría de los hombres trabajan como peones agrícolas y obreros de la construcción, aunque últimamente los más preparados, incluidos mujeres, ofrecen servicio en la industria hotelera, por ser trilingües (francés, inglés y español), y algunos, muy pocos, son profesionales universitarios y empresarios de varias categorías. Pero ignoramos si están organizados políticamente…(Y eso nos puede reservar desagradables sorpresas, como retaguardia del oprobioso pandillerismo de su país).