Dentro de tres días será domingo, un día para levantarse temprano, para gozarlo completo, con una fiesta que durará diez horas, esta vez sin bebidas alcohólicas, ni perico ripiao, ni pareja para bailar pegao, pues será lo que llaman una fiesta ciudadana de las que se arman cada cuatro años para celebrar la democracia y escoger entre todos a los que deberán administrarla en cada pedazo de una patria que no tiene padre ni madre, sino unos tíos que en su mayoría son ciegos, bizcos o tuertos… Así que piensa muy bien lo que vas a hacer en esa fiesta dominguera, para que mañana (como suele suceder) no te arrepientas.