Elsa Peña Nadal: En el 2017 se agravaron los males de los dominicanos; vimos cómo jugaban con nuestra inteligencia y nos presentaron un país que solo existía en la publicidad y en el discurso de quienes, a su voluntad, manejan y disfrutan del erario. Esto se reflejó en las vergonzosas cifras que alcanzamos en los indicadores del desarrollo humano. Pero, cabe resaltar que el 2017 constituyó un punto de inflexión en la conciencia y en el accionar de los dominicanos: Teñimos de verde las calles de Quisqueya, reclamando un mejor país para todos, sin corrupción ni impunidad. ¡Contigo, el 2018 promete!
2018 promete
En el 2017 se agravaron los males de los dominicanos; vimos cómo jugaban con nuestra inteligencia y nos presentaron un país que solo existía en la publicidad y en el discurso de quienes, a su voluntad, manejan y disfrutan del erario.