Cuando Leonel dijo que Abinader lo copiaba, pensé en mi época de profesor universitario, cuando preocupaban aquellos estudiantes que no eran aplicados y en las evaluaciones del aprendizaje buscan sentarse cerca de los alumnos más estudiosos. Aquellos son diestros y maliciosos en fijarse leyendo con vistas de águilas lo que escribe el más aplicado. También se aseguran de llevar “el chivo” en un papelito, o escrito en la palma de la mano o en el antebrazo, cubriéndose con mangas largas.
En mis décadas de catedrático y funcionario académico en la UASD organizaba a los profesores entrenamientos y seminarios sobre la evaluación de los aprendizajes; como docente recurrentemente aplicaba pruebas con respuestas cruzadas que validaban las respuestas, o advertía que el examen era con libros abiertos y podían consultar los libros de textos y consultas. Difícilmente, podían fijarse.
“Fijarse y sacar chivos” falsea la evaluación y sus resultados arrojan un deficiente profesional. Exactamente eso ocurre cuando un presidente copia del líder opositor, resultando ser un presidente que no se preparó. Y eso es lo que está ocurriendo con el gobierno.
Gerenciar crisis de Estado, con efectos mundiales, no es para personas sin aprendizajes propios. Lo está sufriendo el pueblo dominicano; en educación, seguridad ciudadana, salud, desempleo, abastecimientos de alimentos, combustibles, energía y sobre todo manejo de la macroeconomía.
El Poder embriaga cuando los que gobiernan se detienen a disfrutar su glamour; los distrae el taconeo de los guardias, cuando acompañado de un saludo llevándose la mano derecha al quepis y le dice “Su excelencia, saludo con el mayor respeto”; los funcionarios o el Presidente se pavonea. Peor aún, cuando se envuelven en la cotidianidad burocrática olvidándose de que desde sus posiciones se diseñan, formalizan y ejecutan políticas públicas sustentadas en un presupuesto aprobado por el Congreso, para servirle a la población en sus necesidades; el descuido es tan obvio que los lleva a gastos no previstos o no ejecutarlo por incapaces manejos.
El Dr. Leonel Fernández se ha convertido en la respuesta a esta crisis de manejo del Estado. Es el líder del país desde la oposición, todo por su capacidad y experiencia de Estado, entre otras cosas. Ahora su organización política abre sus puertas de par en par para que las mujeres entren democráticamente al más alto organismo de dirección política partidaria; desde donde se diseña y ejecuta la estrategia política. Nunca un partido dominicano había puesto a danzar con panderos en manos a las mujeres como lo hizo por primera vez Miriam, la hermana de Moisés y Aarón 1,300 (a.C.).
Para abrirles las puertas a las mujeres de los partidos políticos se debe ser creativo y tener iniciativas, sobre todo quien no “se fija ni copia chivos” porque no hay nadie que lo haya hecho en nuestro país. El referente ahora lo es la Fuerza del Pueblo y podría ser copiado.
La Fuerza del Pueblo fijó la celebración del proceso democrático y estatutario de elección para el domingo 25 de octubre; escoger 20 de 100 mujeres inscritas para competir. Ellas reforzarán -las elegidas y las que no- la trayectoria hacia el poder. Las elegidas darán su características de mujeres trabajadoras, honestas y consagradas, y las restantes permanecerán estoicas y en igual entrega de labores propias en la Dirección Central, máximo organismo.