Las expresiones condiciones atmosféricas, estado del tiempo o, simplemente, tiempo son las adecuadas para hablar del estado atmosférico en un lugar y un momento dados.
Sin embargo, no es raro que en las noticias se usen los términos meteorología y climatología para referirse al tiempo atmosférico: «Una meteorología muy adversa, con elevadas temperaturas y rachas de viento en la zona, está dificultando las labores de extinción del incendio que se declaró el sábado», «El partido se ha suspendido debido a la meteorología adversa de las últimas horas» o «El inicio de las obras está previsto para después del invierno, para evitar complicaciones por la mala climatología».
En propiedad, la meteorología es la ‘ciencia que estudia los fenómenos atmosféricos’ y la climatología es el ‘estudio del clima’ y el ‘conjunto de las características propias del clima de una región determinada’, tal como explica el Diccionario panhispánico de dudas; es decir, son disciplinas que estudian y caracterizan el tiempo desde diferentes puntos de vista, pero no se aplican al tiempo en sí.
Por ello, resulta más apropiado hablar de estado del tiempo, condiciones atmosféricas, condiciones meteorológicas o tiempo atmosférico, así como de buen tiempo, tiempo soleado, mal tiempo, tiempo lluvioso y otras expresiones similares.
De este modo, en los ejemplos anteriores podría haberse escrito «Un tiempo muy adverso, con elevadas temperaturas y rachas de viento en la zona, está dificultando las labores de extinción del incendio que se declaró el sábado», «El partido se ha suspendido debido a las condiciones atmosféricas adversas de las últimas horas» y «El inicio de las obras está previsto para después del invierno, para evitar complicaciones por el mal tiempo».