Antes que termine el mes de marzo me gustaría recordar que ayer celebramos, si de alguna manera la fecha se presta para festejar, el Día Mundial del Teatro, instituido desde 1961 por el Instituto Internacional del Teatro (ITI).
Si hay avances en torno a este sector en el país puede ser en torno a la calidad de las piezas que se presentan y la cantidad de profesionales del área que se forman, que contrasta con las reales conquistas que la clase reclama, entre ellas, un marco normativo que pueda de manera oficial y legal organizar y fomentar el crecimiento de los teatristas.
Tomando en cuenta que el teatro es una de las artes escénicas más importantes, que conjuga una variedad de elementos y que en el país hay una legión de adeptos que disfrutan de estos montajes, la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), instauró en 2018 el Soberano a las Artes Escénicas, de manera que pudiéramos visibilizar aún más a los protagonistas de este género artístico universal, en una plataforma tan importante para el arte y la cultura como es el Premio Soberano.
El público recibió con beneplácito la decisión que adoptamos en ese momento, siendo la veterana actriz y artista Cecilia García, en quien recayó el primer galardón, a quien le reconocimos por sus 50 años en el arte.
Destacar en esta fecha a otras grandes mujeres del teatro que con talento y pasión han hecho que el público mantenga el amor a un arte que paga mal a sus protagonistas, que deben vivir de otra cosa, más no del teatro.
Es oportuno también que recordemos a la primera titiritera dominicana, Ana Hilda García, que con Don Pancho, sembró el amor por este arte en pequeños y adultos, por allá por el 1952, cuando inició su carrera artística.
Volviendo a las necesidades del sector, es oportuno que los legisladores comprendan la importancia de aprobar leyes que ayuden en el fortalecimiento de la industria cultural en general.
En ese orden en marzo de 2021 la Unión Dominicana de Artistas de la Actuación, que preside Giovanny Jerez, entregó una propuesta de Ley de Teatro a una comisión encabezada por el senador Antonio Taveras y el diputado José Horacio Rodríguez, pero aún no sucede nada con esta posible pieza legislativa, pese al compromiso que en campaña asumió Rodríguez de que trabajaría para su aprobación.
El teatro como parte esencial de lo que se denomina la economía naranja tiene mucho que aportar para el fortalecimiento de la industria cultural de un país.