Cuando se habla de las posibilidades de que el presidente Luis Abinader logre o no la reelección en el 2024, muchos señalan como un posible factor en contra el hecho de que el hoy gobernante llegó al cargo en una coyuntura muy distinta a la actual. Resaltan que los elementos que provocaron su victoria no existen, o han cambiado. Y es así, en alguna medida. Entre los factores que contribuyeron al triunfo en primera vuelta de Abinader y el PRM se menciona la división del PLD como uno de los principales. También se cita como un hecho fundamental la indignación colectiva por la suspensión de las elecciones de febrero, lo que habría incidido en la victoria del PRM tanto en las municipales que se efectuaron en abril, como en las congresuales y presidenciales, que se celebraron en julio. Son elementos que ya no están en el ambiente. Sin embargo, un Presidente puede lograr su reelección por causas distintas a las que motivaron su elección anterior. En la historia reciente tenemos varios casos.
Experiencias anteriores
Leonel Fernández ganó ampliamente en el 2004, en gran medida impulsado por la crisis que sufrió el país en la gestión de Hipólito Mejía. Fernández hizo una campaña basada fundamentalmente en el impacto de la crisis en los bolsillos de los dominicanos. Luego triunfó en 2008, en un ambiente distinto. Había logrado superar la crisis, lo que lo catapultó, aunque ya eso no era tema en la campaña, pero él se encargó de hacer lo necesario para lograr la reelección, comenzando por derrotar la disidencia interna que encarnaba Danilo Medina. Y otro ejemplo es del propio Danilo, quien ganó en el 2012, gracias a Leonel, y en el 16 ganó, a pesar de Leonel.
Retener, más fácil que obtener
Con un poco de suerte en lo concerniente al impacto de factores externos y haciendo su tarea en lo que sí puede controlar, un Presidente tiene todas las posibilidades de vencer a sus adversarios, sea en primera o segunda vuelta. Desde la Presidencia, un gobernante puede hacer muchas cosas, mientras la oposición solo puede criticar y prometer.