¡Buen jueves, tengan todos los distinguidos lectores de elCaribe! En esta entrega de Periodismo y Gramática quiero que refresquemos sobre un uso gramatical en uno de los signos de puntuación muy importante y que suele confundir en muchas ocasiones. Me refiero al “punto final”, ese signo ortográfico que se usa para cerrar un escrito o una división importante de un texto.
A partir de este momento debe quedarse en nuestra memoria que:
Los títulos no llevan punto final.
Los subtítulos no llevan punto final.
Las exclamaciones tampoco llevan punto final.
Las expresiones con signo de interrogación no llevan punto final.
No se usa punto final en los nombres de autor en cubiertas, portadas, prólogos, firmas de cartas y otros documentos.
No se escribe punto final detrás del punto suspensivo.
En la parte de los signos de interrogación y exclamación hay una nota curiosa que debemos tener pendiente: no llevan punto final porque ambos signos lo tienen incluido en su simbología (¿?) y (¡!).
Aunque hay otros renglones en los que también no se coloca el punto final, en esta ocasión solo abarcaremos estos que son los más usados en la cotidianidad, porque la regla gramatical es amplia en esta parte que no cabe en estas poco más de cuatrocientas palabras.
Pero sí quiero que quede claro que, además, la expresión correcta respecto a este signo es “punto final” (no “punto y final”) como suele escribirse de manera incorrecta en algunos medios de comunicación y en algunos escritos, tal como señala la Fundéu.
“…en los medios de comunicación se emplea a menudo la variante impropia punto y final: ‘La procesión que puso punto y final a la Semana Santa’, ‘La cantante pone punto y final a su vida en Barcelona y se marcha a Miami’ o ‘El equipo pone punto y final a la temporada’”.
Así que ya lo sabes, de ahora en adelante ten en cuenta que el punto final tiene su regla a aplicar, igual que todos los signos ortográficos, y que debemos conocerla para no cometer esas faltas que denotan desconocimiento de las reglas gramaticales y derivan en una deficiente calidad profesional.
Te invito a que amplíes el conocimiento sobre las normas gramaticales en cuanto al punto final y vayas más allá de lo que hemos compartido en esta entrega.
¡Gracias por leerme!