Si queremos tener éxito en cualquier actividad que desarrollemos debemos estar consciente de la importancia de crear hábitos que cada día nos acercan y nos ayuden a lograr el éxito que hemos soñado. Los hábitos, son esas pequeñas acciones que realizamos días tras día, que se van convirtiendo en una costumbre y posteriormente se realizan de manera automática.
En ese orden, hay que destacar que los hábitos son esas pequeñas acciones que realizamos días tras día, que se van convirtiendo en una costumbre y posteriormente se realizan de manera automática. En ese orden, Alex Dey, en el libro titulado “Créalo, sí se puede”, al referirse a los hábitos, ha planteado lo siguiente:
Los hábitos son una especie de polilla que se apodera de nuestro cuerpo y nuestra mente; los seres humanos somos criaturas de hábitos. Esto significa que la mente subconsciente es muy inteligente: cuando recibe el mismo pensamiento repetidas veces, hace las cosas automáticamente. Dice “¡Ah! Esta orden es la misma, va de aquel lado (Dey, p.31).
En este contexto, los hábitos son las herramientas que nos impulsarán a alcanzar el éxito. Es por lo que, hay que estar consciente que cuando desarrollamos una actividad por tres (3) días tenemos motivación, a las tres (3) semanas logramos crear un hábito, a los tres (3) meses tienes resultados y a los tres (3) años se está cumpliendo tu objetivo.
Por tales razones, un hábito que debemos cultivar es el de la lectura, es una de las mejores decisiones que puede tomar una persona que desea superarse y tener éxito en cualquier actividad. Es por lo que, a través de la lectura nos conectamos con las mentes más lucida que han existido en este mundo.
En síntesis, si queremos alcanzar nuestras metas y lograr el éxito, debemos iniciar cambiando nuestros hábitos. Como bien decía el filósofo, Aristóteles “Somos lo que hacemos repetidamente, La excelencia, entonces, no es un acto, sino un hábito. Por tales razones, si queremos resultados diferentes debemos realizar cosas diferentes, y esto inicia cambiando nuestros malos hábitos, por hábitos positivos, que nos impulsen a lograr el éxito.
En ese sentido, hay que tener presente que la carrera hacia el éxito, no es una carrera de velocidad, sino de confianza, consistencia, disciplina, entrega, trabajo duro, dedicación, y creación de buenos hábitos.