Esta semana circuló en Facebook el relato de una pareja canadiense que pasó una semana en Punta Cana y se infectó con larva “migrans”. De la red saltó a la gran prensa, incluyendo CNN, Cosmopolitan, The Guardian, La República de Perú y a otros medios.
La especialista dominicana Nurys Castro, profesora de la UASD, me explicó que la infección con larva “migrans” es frecuente en países de clima tropical. La produce larvas de ucinarias que viven en los intestinos de perros y gatos, que expulsan los huevos con materias fecales, embrionan y de ellos salen las larvas, se transforman en filariformes, penetran la piel humana y se mueven debajo de ella.
El título de esta historia en La República dice: Sus vacaciones en Punta Cana tuvieron un terrible final. Añade: “Todo terminó muy mal. Caminaron descalzos en la playa sin imaginar las terribles consecuencias que sufrirían”. Resumiendo la traducción de algunas partes las versiones publicadas en inglés:
Una joven pareja canadiense que retornó de unas vacaciones en la República Dominicana está advirtiendo a los vacacionistas a través de Facebook a no ponerse arena “entre los dedos”, luego de que contrajeran parásitos desagradables.
Ellos dicen que comenzaron a sentir una gran comezón en sus pies a mitad de su viaje de una semana mientras paseaban por las playas. De regreso en Canadá, con los pies hinchados Zytner y Stephens visitaron el hospital varias veces, pero no fue hasta el 22 de enero que fueron diagnosticados. Se necesitaron tres médicos para identificar la infección como larva migrans cutánea, que se produce cuando el parásito penetra en la piel.
El Ministerio de Salud de Canadá les negó el tratamiento. Para obtenerlo, la madre de uno de ellos viajó a Estados Unidos y lo compró en una farmacia.
El Dr. Caplivski, médico canadiense que no trató a los pacientes, dice que una forma fácil de evitar la infección, común en países en vía de desarrollo, es usar calzado en playas donde deambulan perros y gatos y acostarse en una toalla, pues toda la piel desnuda es susceptible a la infección.
Creo que los doctores canadienses tardaron muchos en diagnosticar un problema que un médico dominicano hubiera resuelto rápidamente y evitado que se agravara. También contribuyó la negativa del Ministerio de Salud a suministrar el medicamento.
El año pasado recibimos 6.1 millones de turistas y en un país en que abundan los perros realengos solo tenemos un caso reportado. Este episodio deja lecciones. Muestra cómo los medios pueden manejar una información viral en una red social, y el negativo impacto que pueden causar en la reputación de un destino turístico. Está el caso de las falsedades difundidas aprovechando el paso del huracán María. Lecciones:
1. Cualquier detalle puede producir efectos muy negativos para un destino (¿Quién cuida las playas y parques de perros y gastos realengos?).
2. Es importante tener herramientas propias para lanzar un alud de información positiva (en este caso sobre Punta Cana).