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Pasada la una de la tarde del pasado lunes, en el caos de la Duarte con París estaba atestada de compradores. La mayoría mujeres que buscaban toda clase de mercancías.
Mientras tanto, el toque de bocinas de carros, camionetas, autobuses y hasta patanas, se escuchaban ruidosamente. Un desorden que no podían controlar los agentes del tránsito.
Y los peatones cruzando la Avenida Duarte en forma despavorida, corriendo aceleradamente, para evitar ser atropellados. Pero, ¿hasta cuándo será este infierno?
El alcalde del Distrito Nacional, David Collado, volvió a prometer que el serio arrabal de la Duarte con París “tendrá pronto una solución”. Es algo que ha repetido varias veces, pero su promesa se queda en palabras huecas.
La más reciente promesa en tal sentido que hizo Collado, se publicó en el periódico Listín Diario. Fue la siguiente: “Esta alcaldía tiene previsto la inversión de 17 millones de pesos en obras en el mercado Nuevo de la Avenida Duarte y la recuperación de la Duarte con París”.
Como el periodismo es objetividad, veracidad (que significa la verdad inocultable), también déjenme recordar lo que dijo el joven alcalde en reacción a un reportaje que escribí para elCaribe sobre el viejo arrabal de la Duarte con París.
En una noticia basada en su nueva declaración a la prensa, esto afirmó Collado: “El alcalde del Distrito Nacional, David Collado, reconoció que está consciente de las problemáticas que se viven en la intersección Duarte con París de esta capital, aunque advirtió que tiene planes para higienizar y organizar ese caos que ha afectado durante décadas”.
Entre tanto, el colega Marcos Rodríguez, de la redacción de elCaribe, escribió: “Collado opinó en ese sentido al leer el reportaje publicado recientemente en este periódico con el título “Arrabalización se traga la Duarte con París”, del periodista Carlos Nina Gómez, donde se describe el ambiente de los establecimientos ubicados ahí”.
Reconozco que Collado ha realizado un positivo trabajo a nivel del “polo urbano” del Gran Santo Domingo. Las principales avenidas (27 de Febrero, Winston Churchill, George Washington, Lope de Vega, Tiradentes, Gustavo Mejía Ricart…), lucen limpias, atractivas para la vista de los munícipes y turistas.
Pero el alcalde debe extender su buena labor urbana a todo el Distrito Nacional. Trabajar más en la marginada parte alta. Y, desde luego, acabar con el arrabal de la Duarte con París.
¿Cuándo lo hará?
