Hoy inicia el pago del salario 13 en la Administración Pública y ayer la Policía Nacional comenzó, con la colaboración del Ministerio de Defensa, el “Operativo de Seguridad Navidad Tranquila”. Son dos eventos independientes, pero muy vinculados.El inicio del pago hoy de 17,000 millones de pesos por concepto de la “regalía pascual” o “doble sueldo” para los empleados del Gobierno Central y los jubilados y pensionados del Estado implica un aumento en la circulación de dinero. Ese aumento en el circulante incrementa el peligro de presencia de delincuentes procurando algún tipo de participación en ese extra monetario.
El envío a las calles de 29,538 efectivos policiales y militares en labores preventivas durante las festividades navideñas es una medida importante, pero no suficiente para prevenir delitos como robos, asaltos y hasta estafas. La ciudadanía, especialmente los que a partir de hoy comienzan a recibir el pago del salario número 13, debe asumir su particular cuidado, su propia actitud de precaución.
Una primera actitud de prevención debiera ser la disciplina en el gasto, evitar la tentación de ser comprador compulsivo. Se asume que el dinero de la Regalía está previamente comprometido, en algunos casos adeudado y en otros con usos definidos. Como todo ingreso, el “doble sueldo” tiene tres posibles destinos: consumo, ahorro o inversión. Y difícilmente alcance para los tres. Para dos a lo sumo.
Por ese límite en el destino de los recursos, que lo da la cuantía involucrada, los receptores deben ser los guardianes principales, tanto en el aspecto del uso como en el cuidado, para evitar que terceros se los roben.
En cambio la Policía Nacional, como cabeza de los operativos preventivos iniciados desde ayer, tiene la responsabilidad de garantizar a la ciudadanía un disfrute pleno de sus festividades, incluyendo el uso del salario navideño de quienes lo cobran.
Como servidores públicos que son, policías y militares, forman parte también de quienes a partir de hoy cobran el salario 13, por lo que tendrán una condición particular para cumplir la misión que les ha sido encomendada. Comedimiento en el gasto, precaución en los lugares donde se le vaya a dar uso a los recursos y prudencia en el consumo son actitudes a tomar en cuenta. Y a quienes cobran la regalía que tengan presente que el tiempo de disfrute apenas comienza.
