El año que termina es casi siempre un tiempo de balances, generalmente de tipo personal, que incluyen logros y postergaciones, mientras el año que llega trae promesas y planes que no estamos del todo seguros de llegar a materializar, pero siempre es bueno saber hacia dónde dirigirnos, y nunca está demás soñar un poco.
Vivimos tiempos convulsos y globalizados, un hecho que sucede a miles de kilómetros puede afectarnos de manera indirecta, cada año es como la caja de Pandora, personaje mitológico que al abrir ese cofre dejó escapar todas las calamidades que encerraba y que desde entonces castigan al mundo, pero en el fondo de esa caja estaba la esperanza, a la que siempre nos aferramos para sobrellevar las vicisitudes.
Un país que ha padecido una pandemia, que muestra recuperación en muchos aspectos de su economía y transita una relativa paz social, en un estado democrático, forma parte de esa esperanza que nos induce a ver el futuro con un poco de optimismo.
Quizá debamos proponernos, al menos lo deseamos; que cada uno de nosotros nos fijemos pequeñas metas, posibles y no tan costosas, como cuidarnos un poco más después de ciertos excesos inevitables en estas fiestas, tomarnos tiempo para pensar detenidamente antes de embarcarnos en temas financieros que no se presentan claros, los que ya peinan canas que acaten el consejo de los años y para los más jóvenes, que busquen un equilibrio entre estudio, trabajo y atención a la familia.
Defender con firmeza el punto de vista propio, pero también respetar la visión de los que piensan diferente, crear un espacio propio en el que tengan cabida las personas que son capaces de aportar cosas positivas, no solo en lo material, apoyar a los que luchan por sus sueños y defienden ideales y colaborar con las causas de quienes ayudan a los demás en todos los ámbitos.
Finalmente, deseamos al pueblo dominicano todo lo mejor, que los festejos transcurran en paz, en armonía y con prudencia, y que sigamos aportando nuestro granito de arena para que tengamos un país mejor y vivamos un excelente y feliz año.