Resultaron innecesarias las medidas coercitivas que implementaron algunas autoridades para evitar desplazamientos o celebraciones durante la Semana Santa. Más bien, esas acciones que prohibían libertades ciudadanas sentaron un mal precedente, contradictorias con el Estado de Derecho del que disfrutamos.

Ninguna autoridad está habilitada constitucionalmente para, en tiempo de paz, implementar medidas correspondientes a estados de excepción. Total, en sentido general la población estuvo recogida, como lo atestigua la poca presencia en playas y balnearios, mientras que el reporte preliminar del COE trae cifras que concuerdan con cualquier fin de semana largo en el país.

El deseo que inicialmente expresamos fue que cada quien se comportara en la ocasión a su manera y a su medida, aunque sobrecoge el alma el solo hecho de pensar en la congoja y ausencia absoluta de celebraciones en las familias que aún lloran a uno o a varios de seres queridos por la tragedia del Jet Set.

Es un duelo imperecedero por una fatalidad agravada al tratarse de una partida súbita, que en opinión de especialistas de la conducta representa mayores riesgos para la salud mental.

Seguimos en oración y pedimos acompañamiento en el dolor a estas familias; una solidaridad que se debe ofrecer con humanidad y respeto, por lo que exhortamos a evitar en lo posible, y particularmente en los medios de comunicación, airear situaciones o precipitar juicios o conclusiones que nada aportan y que tampoco son el mejor consuelo para los que han visto troncharse de repente, sin despedirse, la vida de un ser querido.

La imagen que desearían conservar es recordarlos desbordantes y felices, como quizás todos lo estuvieron al abandonar sus hogares en lo que resultó su último día en la tierra.

Sobre las prohibiciones anteriormente mencionadas, reiteramos que no debe haber espacio en la sociedad dominicana para actos represivos que patrocinan mentes propensas al autoritarismo. Hoy la excusa fue la tragedia en la discoteca; mañana podría ser cualquier otra, incluida perseguir la manera de pensar del que no comulgue con determinado credo religioso o político.

En cuanto al COE y la Semana Mayor, se reeditó su eficacia en la prevención y buena coordinación interinstitucional, con una felicitación especial para brigadistas y socorristas por su sistemática laboriosidad, esta vez con la particularidad de que en su trabajo cargaron con el abatimiento físico y espiritual que para ellos constituyó la tragedia del Jet Set.

Posted in Editorial

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas