Hay casos de ministerios que andan un paso atrás de cuestiones que les atañen, y que al parecer se enteran cuando hay denuncias públicas. Un hecho reciente que retrata ese tipo de comportamiento es el de construcciones ilegales en áreas de la playa Buen Hombre, en Montecristi, y el desmonte de bosque seco en Las Canas, Villa Vásquez. Después que esos problemas estaban “calientes” en la prensa, y que incluso hasta el alcalde pegara el grito al cielo, el ministro de Medio Ambiente se apersonó al lugar y lo menos que hizo fue cancelar a su representante por ciego e inoperante. Algo parecido ocurre con la Ciudad Sanitaria, que de repente, luego de denuncias, se supo que había un plan perfectamente calculado para su culminación.