Tiene que cambiar

Hay preocupación en una parte sana de la sociedad, que no se acostumbra a tantas sandeces y degradación moral que pululan ya no circunscritas a redes sociales pues se abren espacio en medios de comunicación radial, escrita y televisiva, en desmedro de valores positivos y de lo que debieran ser paradigmas para nuestra juventud. Se han hecho rutinarias publicaciones como estas, todas de los últimos días: cantante urbana revela que su compañero, también de ese mundo, la golpeaba durante el embarazo; exponente urbano recibe varias estocadas de parte de su esposa, y apresan al “cantante” Dilon Baby por dar golpiza a su madre. En todo eso hay una gran miseria humana, la que llega acompañada del léxico vulgar y la promoción del lujo y la ostentación como meta de vida.