Si como sugieren diversos sectores y personalidades del país, incluyendo un antiguo jefe policial, los brotes de violencia delictiva que se producen en el tercer trimestre de cada año, guardan relación con el cambio que se espera o busca en la “jefatura”, entonces lo mejor es rezar, porque estaríamos en un esquema de descrédito para hacer saltar del puesto a un oficial solo para subir a otro. Materializar atracos y asaltos con muertes incluidas es un mecanismo macabro, una trama inescrupulosa de provocar la destitución de un jefe policial. Es vox populi que en la Policía Nacional hay grupos de poder que le hacen la vida imposible a cualquiera. Pero que su accionar fuera ilimitado, da de qué hablar.
¿Grupos de poder?
Si como sugieren diversos sectores y personalidades del país, incluyendo un antiguo jefe policial, los brotes de violencia delictiva que se producen en el tercer trimestre de cada año, guardan relación con el cambio que se espera o busca en la “jefatura”, entonces lo mejor es rezar, porque estaríamos en un esquema de descrédito para hacer saltar del puesto a un oficial solo para subir a otro.