El presidente Luis Abinader reiteró el jueves su política de rechazo a las inversiones de la República Popular China en las telecomunicaciones y puertos. Un rechazo a las inversiones de un país para complacer a otro. Fue reafirmada en un escenario adecuado, un encuentro virtual con miembros de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana. Se trata del involucramiento en un conflicto entre China y Estados Unidos, que ha lanzado una campaña de descrédito contra el gigante asiático, su competidor, en el supuesto de que su desarrollo en las telecomunicaciones puede ser utilizado para interferir en los sistemas de información de los estados “aliados”. ¡Y quiénes lo dicen! Los magos del fisgoneo en el mundo.