Finalmente solo 196 personas aspiran a formar parte de la nueva Cámara de Cuentas, cantidad inferior a las 433 que se “apuntaron” cuando se eligió la actual, pero sigue siendo un número significativo que da cuenta y es indicativo de que no escasean en el país las personas que aspiran a sacrificarse por la patria y exhiben desinterés, algo que llevan en las venas, a tono con la enseñanza bíblica: “Porque ni aun el Hijo del hombre vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos” (Marcos 10:45). La esperanza es que estos cargos no estén repartidos de antemano, para no deslucir la creencia generalizada de que en República Dominicana la gente es desprendida y responsable y se “pela” por servir.