Abel Martínez cumple su primer año bajo elogios. Centra su accionar en dos ejes básicos: ornato, manejo y disposición de los desechos para cambiar la cara de Santiago como destino confiable en los negocios, la inversión, y la seguridad ciudadana. No sería prudente irse en alabanzas, porque apenas inicia, y siempre se ha dicho que lo más importante es cómo se termina. Pero hablamos de su desempeño sólo para referirnos tristemente al pasado. A la diferencia entre estar enfocado o desenfocado. El grave error de perseguir la magnificencia, las grandes infraestructuras, sueño utópico de un municipio socialista, cuando lo elemental es la sencillez de las acciones para el buen funcionamiento de la urbe…
Abel y el pasado
Abel Martínez cumple su primer año bajo elogios. Centra su accionar en dos ejes básicos: ornato, manejo y disposición de los desechos para cambiar la cara de Santiago como destino confiable en los negocios, la inversión, y la seguridad ciudadana.