Las noticias que trascienden en la prensa sobre la variación de precios en productos alimenticios no son una sorpresa para los actores involucrados en el sector agropecuario.
Anteriormente señalamos la incidencia de los mercados internacionales en los precios finales de algunos comestibles, sin embargo, hay ciudadanos que señalan la variación de precios en productos nacionales. En estos influye la producción estacionaria, que se ve afectada por la variación en el ciclo de la cosecha en temporadas de verano e invierno.
La verdad es que la mayoría de los productos cosechados en República Dominicana han experimentado una marcada variación a la baja comparada con diciembre de 2020; incluso los precios de junio de 2021 son notablemente más bajos que en años anteriores.
Analizando una tabla comparativa con los precios de algunos en el Merca Santo domingo, podemos observar que muchos productos han encontrado su punto de equilibrio, y esto se debe a dos factores: primero, la estacionalidad de las cosechas, que aumenta la producción de rubros como la cebolla en primavera y el plátano en verano; segundo, la planificación para lograr el equilibrio.
De hecho, es la planificación que ha permitido estabilizar la producción de una serie de productos de consumo masivo, cumpliendo la promesa del presidente Luis Abinader. Se trata de un proceso que toma tiempo debido a que implica la participación de múltiples actores (productores, transportistas, distribuidores), proyectos a desarrollar a mediano plazo, y cuyos efectos ya se están notando.
Consciente de su importancia, y siguiendo las instrucciones del presidente Abinader, el ministro de Agricultura, Limber Cruz, estableció un plan de desarrollo del sector agropecuario que cuenta con 7 ejes, entre ellos la comercialización, que es la última milla en la producción agropecuaria. Sin embargo, los productos como la carne y sus derivados, y el huevo, que dependen mucho para su producción de los precios internacionales del maíz y la soja, han experimentado un alza a nivel mundial, alcanzando en algunos países hasta un 72.9%, como es el caso de Argentina.
En el último mes el precio del maíz, aunque se mantiene elevado, se ha reducido en un 18.78 %, en los mercados internacionales, lo que se comienza a reflejar en los precios de los productos cárnicos que utilizan maíz para su producción.
En los mercados de productores, considerando Merca Santo Domingo como el buque insignia a nivel nacional, debemos jugar un rol estelar en estos momentos, llevando campañas informativas para concientizar al consumidor sobre las ventajas de adquirir en estas instalaciones sus alimentos y además brindar facilidades, como la del transporte, para acercar más los consumidores a las plazas donde puede comercializarse los productos agropecuarios sin intermediarios, sobre todo en esta etapa de estabilización de precios.
Mariana Tavárez De Santos
Subadministradora MERCADOM
