Señor director: Democracia, institucionalidad, soberanía, pluralidad, libertad, independencia, parlamento… Expresiones, enunciados que encierran conceptos que van tomados de la mano.
Siempre se ha dicho, y así lo creo, que el Parlamento, el Congreso Nacional, Cámara de Diputados y Senado de la República, en esencia, es el ente medular de la democracia. Es, en teoría, el Primer Poder del Estado. Quienes lo integran, diputados y senadores, están llamados a llevar esto a la práctica, a la realidad.
He dicho y escrito en otras ocasiones, y lo reitero, que de nuestros Poderes del Estado, al Congreso lo tienen como a la cenicienta. Lo vilipendian por aquí, lo zarandean por allí, lo estrujan por acá. Se le suele catalogar como un mercado, un estercolero. Yo digo y recalco que no es así. Estaría dispuesto a debatirlo.
Por la actitud, por el accionar, por la conducta de uno, de dos, y ni siquiera de tres o cuatro, podemos juzgar a un colectivo tan amplio, podemos juzgar a la institución.
He visto y sufrido cómo nuestros legisladores regularmente no asumen su propia defensa como debieran. Es por ello que recibo con gran beneplácito y aplaudo la actitud, la disposición del nuevo presidente de la Cámara de Diputados, el profesor Radhamés Camacho Cuevas.
En uno de los tramos de su discurso de juramentación el pasado 16 de agosto, Camacho adelantó que ejecutará un programa comunicacional tendente a resaltar la labor legislativa y la buena imagen de la Cámara de Diputados. Aplausos…
“Entre mis planes, junto a los equipos y expertos en materia de comunicación que tiene la Cámara de Diputados, diseñaremos una estrategia de comunicación directa que le diga a la ciudadanía que aquí hay legisladores y legisladoras con formación de tal diversidad, como médicos, ingenieros, profesores, abogados, economistas, expertos en administración pública y privada, periodistas, comerciantes y líderes religiosos, entre otras; así como gremialistas, como me defino yo, hombres y mujeres que han dedicado sus vidas al trabajo y que, política y socialmente su accionar gravita e impacta en todo el territorio nacional”.
Agregando, a renglón seguido, que una de sus primeras acciones estará dirigida a optimizar “cada una de las comisiones y repotenciar en la exposición pública a los líderes legislativos que las dirigen, como efectivamente acontece en los más importantes parlamentos del mundo. Las comisiones, sus decisiones y sus miembros también serán noticia”.
Todo esto, sin que nada vaya en desmedro del rol constitucional que están llamados a cumplir nuestros congresistas: legislar, fiscalizar y representar.
Muy cordialmente,
José Vicente Calderón R.
Periodista