Esta semana he recibido varios mensajes de personas involucradas en la apropiación de los terrenos propiedad del Estado en Pedernales, ya recuperados y destinados a apuntalar el prometedor proyecto de desarrollo turístico para esta provincia y su entorno.
Sus comentarios se suman al escuálido coro de los que quieren justificar el frustrado intento de despojar a la comunidad de las tierras que contribuirán a lanzar un proceso para mejorar la suerte de sus olvidados habitantes y crear condiciones para superar la pobreza en que sobreviven.
Cuando se habla de la pobreza en el país, lo más común es que se piense en la región Sur como la más pobre. Esto es muy genérico porque en el sur existen muchos matices de pobreza. Lo correcto es señalar la Región Enriquillo (RE), como la más pobre, según el mapa de la pobreza (2014). Esta zona comprende las provincias Independencia, Pedernales, Bahoruco y Barahona, ubicas en el entorno del Lago Enriquillo. De ahí su nombre.
Esta región es la primera en el ranquin de las regiones con mayor cantidad de hogares en pobreza con un 69%. En el otro extremo está la región Metropolitana (Santo Domingo) con el 31%. El 80% de los hogares en la zona rural del extremo sur son pobres y el 49% vive en pobreza extrema. En 66% de los hogares urbanos son pobres y el 26% está en pobreza extrema.
Si hablamos de las personas el 67% de los residentes urbanos viven en pobreza y el 25% en pobreza extrema. En los campos el 80% son pobres y el 49% está en pobreza extrema. La provincia más pobre es Elías Piña con 83% de hogares en la pobreza, pero a continuación están Bahoruco (75%), Pedernales (74%), Independencia (73%) y Barahona (65%). Quizás algunas cifras han cambiado pero el panorama es el mismo.
En el caso Pedernales, su principal riqueza natural es la biodiversidad de su territorio. Tiene 2,075.5 kilómetros cuadrados, y el 68% de su superficie es área protegida (1,318 km cuadrados, parques Jaragua y Sierra de Bahoruco). Solo 14 kilómetros lineales de sus playas están fuera de la superficie protegida. Todo su territorio es una reserva de la biósfera.
Esta provincia ha subsistido con la limitada agricultura del municipio de Oviedo. También de la minería, del municipio de Pedernales, y -por un breve tiempo- de la fracasada fábrica de cemento que operó en Cabo Rojo.
En 1993 el 82% de los hogares estaban en pobreza y esta provincia ocupaba el puesto número 17 en el vergonzoso ranquin de la pobreza; nueve años después -en 2002- el 75% de los hogares estaban en esta condición, pero ocupaba el puesto 9 de la lista, y en el 2010 los hogares pobres eran el 75%, pero había subido siete escalones más para ocupar el puesto dos y ser la segunda provincia más pobre, detrás de Elías Piña.
Esto nos dice que mientras el país avanzó, Pedernales se hizo más pobre a pesar de la minería y del cemento. Esto justifica la decisión del presidente Luis Abinader de asumir el proyecto de desarrollo turístico que tiene varios años patinando. El tema de las tierras turísticas ya está resuelto, aunque algunos quieren dañarlo. Un proyecto de desarrollo turístico dará a Pedernales en una década, el progreso que no logró la minería en 60 años.