La ciencia política es una disciplina amplia y variada cuyo objeto de estudio es el análisis de los fenómenos políticos, poder político, gobierno, instituciones y actores en la sociedad. Además, la toma de decisiones en el marco de los sistemas políticos, tanto en el ámbito nacional como internacional.
En este contexto, la ciencia política es una disciplina que tiene sus raíces en la filosofía política, con grandes pensadores como: Platón y Aristóteles. Sin embargo, ha evolucionado con el tiempo adaptándose a los cambios en la estructura del poder global y local, ubicándose en el campo de las ciencias sociales. Esto es así, ya que en la actualidad interactúa con otras áreas del conocimiento y se nutre de diversas teorías y métodos.
En ese sentido, esta interacción con otras áreas del conocimiento, representa parte de los retos y desafíos de la ciencia policía, partiendo del hecho que nos encontramos en un mundo globalizado, donde la incertidumbre y los cambios constantes generan nuevos desafíos en la comprensión de los fenómenos políticos.
Por tales razones, en un mundo cada vez más interconectado, los sistemas políticos nacionales ya no son fenómenos aislados, sino que están influenciados por factores internacionales, económicos, sociales y tecnológicos que alteran las dinámicas del poder. Esto plantea la pregunta: ¿cómo puede la ciencia política adaptarse a estos cambios y continuar proporcionando marcos analíticos útiles para la toma de decisiones políticas?
En esas atenciones, hay que destacar que los cambios acelerados en la política mundial — el populismo, las crisis migratorias, el cambio climático, las nuevas formas de comunicación digital y el impacto de las redes sociales— están desafiando las teorías y los modelos tradicionales de la ciencia política. A medida que las sociedades se globalizan y diversifican, se hace cada vez más difícil abordar de manera efectiva los fenómenos políticos que ocurren a diferentes escalas.
En síntesis, se colige que el estudio de la ciencia política, es fundamental en el ámbito académico y profesional, dada su capacidad para proporcionar un marco analítico sobre el poder, la gobernanza, las instituciones y las dinámicas sociales y económicas que dan forma a las políticas públicas.
No obstante, hay algunos retos y desafíos importantes como: las crisis de legitimidad de las instituciones políticas, la creciente polarización ideológica, y el cuestionamiento de las democracias representativas, lo que genera un escenario inestable para la investigación y la enseñanza de la ciencia política.