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Jesús -Chu- Vásquez, un veterano dirigente político del llamado “viejo PRD”, (que es ahora el disminuido Partido Revolucionario Dominicano que durante más de 30 años lideró con eficiencia y humildad el doctor José Francisco Peña Gómez), ha sido en estos tiempos de la política moderna local un afortunado funcionario de la administración pública.
El señor Chu Vásquez, en la exitosa etapa del PRD, tuvo recordados desempeños en el Congreso Nacional e incluso llegó a ser presidente del Senado de la República cuya gestión pasó con “poca gloria y muchas penas”.
Pero la suerte, en la era del nuevo PRD -que es igual que llamarlo el Partido Revolucionario Moderno, PRM-, le siguió acompañando porque en el primer gobierno del perremeísmo, período 2020-2024, trabajó cuatro años corridos en rol de ministro de Interior y Policía, uno de los cargos más importantes del Estado.
Hago notar -y así refresco memorias- que Chu Vásquez, siempre con una sonrisa “de oreja a oreja” y en medio de las caminatas, tempranito en la mañana en el Mirador Sur, solía dar sus saludos cordiales a los caminantes y corredores.
Desde luego, el ahora flamante cónsul de República Dominicana en la ciudad de Nueva York, no estaba en el poder… eran los tiempos de cuando el PRM era partido de oposición. Gobernaba el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Pero a las dos semanas de haber sido designado como ministro de Interior y Policía, el grandulón funcionario ¡Se esfumó del Mirador!
Pero, ¿por qué el poder marea? La frase-pregunta la plasmo para seguir con Chu Vásquez, pero ahora en su calidad de cónsul general en Nueva York donde llegó hace menos de dos meses para suceder a Elio Jáquez que ocupó ese cargo por cuatro años.
En mi más reciente viaje a Nueva York, con una estancia vacacional del 23 de julio al 9 de agosto, ya me había enterado -gracias a mi olfato periodístico- de que el presidente Abinader, en su nueva administración del Estado, tenía el decreto listo para designar a Chu Vásquez en el consulado.
Un veterano periodista dominicano, distinguido amigo y con quien siempre comparto cuando visito La Gran Manzana, me adelantó: “Oye, ¿sabes quién viene para acá como cónsul? Viene Chu Vásquez. Es que ya terminó el tiempo de Eligio Jáquez”, fue su revelación.
No niego que el asombro se apoderó de mí. Porque, de acuerdo con otros informes, pensaba que el cargo lo iba a desempeñar otro connotado dirigente del PRM con larga residencia en Nueva York.
Continuará…