El 16 de agosto de 1968 el entonces presidente de la República Dr. Joaquín Balaguer inauguró el Barrio de los Maestros y entregó las llaves de las viviendas a los que en el sorteo celebrado en la Lotería Nacional nos habíamos ganado el derecho a comprar dichas viviendas.
En razón de que muchos vivíamos en casas alquiladas tratamos de inmediato mudarnos a las casas que desde hace tiempo habíamos soñado, pero como no existía laaAvenida Dr. Rómulo Betancourt, ni contábamos con carros públicos debíamos salir a pie a la Avenida 27 de Febrero para tomar conchos que nos llevarían a nuestros trabajos.
Diligenciamos regularizar esa situación y por las dificultades de transportación que en sus principios padecía el Barrio de los Maestros, el 24 de Septiembre de 1968 el licenciado Juan E. Portorreal (Tanito) el coautor de este artículo doctor José Nicolás Almánzar nos apersonamos a la Iglesia de Las Mercedes, localizada en la Zona Colonial para entrevistarnos con Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito, para esa época máxima autoridad eclesiástica del Arzobispado de Santo Domingo y quien oficiaba en ese templo la misa en honor de la Virgen de Las Mercedes, patrona del pueblo dominicano y cuya festividad se celebraba exactamente en ese día.
En nuestra conversación le manifestamos que en domingos anteriores por falta de un sacerdote y las dificultades de transportación no habíamos oído misa por lo que le rogábamos, muy encarecidamente, nos enviara un sacerdote aunque fuera solo para los domingos.
La primera misa
Fruto de nuestras diligencias monseñor Polanco conversó con el párroco de la Iglesia Santísima Trinidad, en ese entonces el reverendo padre Láutico García S.J., quien al exponerle nuestro caso dispuso que el reverendo padre Marcial Bedoya quien era uno de sus sacerdotes coadjutores, oficiara misa en nuestro barrio todos los domingos.
La primera misa fue oficiada en la marquesina de los esposos Nicolás y Esperanza Almánzar el 25 de octubre de 1968, día de Cristo Rey, por el reverendo padre Marcial Bedoya, quien al crearse la Parroquia sería su primer párroco.
En nuestra marquesina hay una tarja que conmemora tan agradable acontecimiento, la cual fue inaugurada en junio del año 2001 a diligencias del reverendo padre Iván Omar Santos, para esa época párroco de Jesús Maestro.
La tarja en cuestión dice lo siguiente:
“En este lugar fue celebrada la primera misa de este barrio de Los Maestros oficiada por el reverendo padre Marcial Bedoya S.J., el 25 de octubre de 1968 siendo Día de Cristo Rey”.
Para su develizamiento se invitaron a varios fundadores del barrio de Los Maestros y en la santidad y humildad que caracterizaba al padre Bedoya, me dijo lo siguiente: “Esto está muy bien pero la tarja tiene un error porque no había que mencionar mi nombre para nada.”
Con tan justo motivo fue celebrada una solemne misa oficiada por su excelencia reverendísima monseñor Jesús Castro, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santo Domingo, quien en su homilía destacó la importancia y excelente labor desarrollada por esta parroquia, haciendo mención de la ponderada labor desplegada por algunos de sus párrocos como Jesús Santísimo, S.J., Catalino Tejada, miembro del Camino Neocatecomunal y Carlos Rodríguez S.J., pero lamentablemente no se mencionó al sacerdote que fue la bujía inspiradora de todo lo que se hizo y se hace en esta parroquia que fue el Reverendo Padre Marcial Bedoya S.J., quien falleciera y de quien no tenemos duda de que está en el cielo, quien además de oficiar la primera misa arriba mencionada por ser el primer párroco, y que hasta su muerte estuvo ligado extremadamente a todas las actividades católicas cristianas del sector, pues cuando en 1979 fue designado párroco de Dajabón no perdió nunca su comunicación y preocupación por la parroquia y los feligreses de Jesús Maestro.
El salón parroquial construido por los desvelos y la colaboración de los integrantes del sector, fue el sitio adecuado para oficiar las misas diarias y dominicales. En esta humilde edificación dormía el padre Bedoya y el hermano Sánchez quien fue el administrador y organizador de todas las actividades de la parroquia.
Debo consignar que la mayoría de los presentes en la misa se quedaron confundidos y extrañados porque se omitió el nombre del padre Bedoya, ya fallecido pero cuya presencia ha quedado grabada permanentemente en el corazón de los miembros de esta parroquia.
No sería justo si no mencionáramos a los sacerdotes que también realizaron una labor imperecedera al frente de esta parroquia como fueron el padre Gonzalo Barrientos S.J., padre Omar Iván, Humberto Santos Del Carmen, neocatecumeno, padre Lucas Burato, italiano y quien aisladamente se desempeñaba como párroco con gran humildad y entrega a esta noble parroquia.
Esta parroquia ha dado origen a otras parroquias como Jesús Sumo y Eterno Sacerdote, San Juan Bautista de la Sallé y la Visitación, no tenemos duda de que llegará el tiempo en que el Santo Padre lleve al padre Bedoya a los altares.