“Como fundadora ADP, y su primera presidenta, pido a docentes miembros ADP voten por @XIOMARAGUANTE. Como ella dice “hay que recuperar identidad ADP”, basta de ser clon Minerd”.
Ese tuit de @iveprats, la doctora Ivelisse Prat Ramírez, el vehemente llamado de inspiración estrictamente gremial de la pedagoga a quien el país reconoce como una patriarca de la educación, por militancia gremialista, por praxis y teoría de la educación, dan una idea del momento crucial a que se aboca el sindicato de los maestros.
Obsérvese que ella, destacada y respetada dirigente del PRM, no alude al tema partidario. Exhorta como fundadora y primera presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores, propugna y defiende el compromiso de Xiomara Guante fundamentalmente con la recuperación de la identidad de ADP.
Una identidad hoy desdibujada por vulneración de su autonomía por una directiva amarilla entregada al patrón, un gobierno que no respeta institución alguna, ni siquiera la Constitución y las leyes.
Alrededor de la candidatura de Xiomara a la presidencia de la ADP está cuajando un flujo de unidad gremial que ya el Día de las Mercedes logró que la segunda fuerza del gremio, la José Francisco Peña Gómez, la segunda y la tercera, Juan Pablo Duarte y Narciso González, depositaran un acuerdo de intención, de donde saldrán las planchas nacional y municipales que conformarán una gran alianza por el cambio frente a pretensión reeleccionista del diputado Eduardo Hidalgo como su presidente.
Priorizan las corrientes José Francisco Peña Gómez, Juan Pablo Duarte y Narciso González una agenda programática de cambio únicamente comprometida con la educación y los intereses de las y los maestros.
He observado de cerca el proceso y he palpado el interés de los dirigentes magisteriales por articular un cambio en el gremio que los lleve a legitimar sus conquistas, nuevas demandas y derechos en un compromiso con la calidad de la educación.
Los maestros y maestras son testigos de primera línea de que el Minerd fracasó en usar el 4% del financiamiento a la educación para imprimirle calidad, y que corresponde a ellos acompañar un relanzamiento de una educación que sirva al desarrollo humano e integral del país.
Saben ellos que no es calidad educativa construir aulas, que no lo son los negocio de los alimentos los negocios con mochilas, zapatos y otros materiales, que ya el país ha podido ver cómo se usan en el proselitismo de los candidatos oficialistas.
Invertir el Minerd 1 millón 400 mil pesos diarios en publicidad puede servir o mal servir a promover la egolatría de funcionarios con aspiraciones políticas, pero no a invertir donde realmente se necesidad para mejorar la educación.
Por eso las propuestas que encarnan Xiomara Guante y las alianzas que sustentan su candidatura, llevan a trascender el interés político y partidario y apalancar los compromisos por recuperar la identidad del gremio y afianzar las conquistas magisteriales en el compromiso con la educación de calidad.