Considero oportuna la designación del licenciado Celso Marranzini como presidente del Consejo Unificado de la Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), ya que esas empresas necesitan reorientar su dirección para, principalmente, continuar la reducción de sus pérdidas, que aún está por encima del 36%.
Por su experiencia en el sector eléctrico, el licenciado Marranzini puede ayudar a impulsar más la recuperación de las Edes, y cooperar con el Gobierno en la disminución del subsidio al área de electricidad, que este año puede ser de RD$86,393 millones, según está contemplado en el Presupuesto General de la Nación del 2024.
La destinación de esa cantidad de recursos al subsidio al sector eléctrico resulta preocupante para gran parte de la sociedad, incluso para organismos internacionales, como el Banco Mundial.
El avance de todas las empresas debe estar sustentada en recursos humanos y materiales, y las Edes han adolecido de esos elementos en gran parte de su historia. No es posible aumentar la gestión técnica comercial sin suficientes materiales, incluyendo medidores y cables, para instalar servicios a nuevos clientes o corregir averías a otros.
La reducción de las pérdidas de las Edes debe estar sustentada en el aumento de los clientes, el combate al fraude y la conversión de usuarios irregulares en clientes.
Sin esas acciones, las pérdidas de esas empresas pueden ser mayores, tomando en cuenta que el aumento del calor por el cambio climático incrementa cada vez más la demanda de energía eléctrica de los clientes y de quienes consumen más del 36% de la electricidad sin pagarla.
La mejoría de la economía es otro factor que impulsa hacia arriba la demanda de electricidad en todo el territorio nacional, por lo que las Edes deben estar abastecidas con materiales suficientes para atender sin dilación las solicitudes de servicios de nuevos clientes y hacer las gestiones técnicas y comerciales necesarias para evitar conexiones ilegales.
No es posible que algunos solicitantes de nuevos contratos o clientes tengan que valerse de amigos para lograr la instalación de un nuevo servicio, cambio de potencia o arreglo de una avería, como ha sucedido históricamente en las distribuidoras de electricidad.
Mi posición respecto a las Edes siempre ha sido, incluso cuando ejercí una función en el sector eléctrico: “El combate al fraude, gestión técnica y comercial es la solución”. Eso lo he repetido en escenarios compuestos por tomadores de decisiones.
El sector eléctrico, ahora y antes, ha estado compuesto por técnicos y profesionales bien preparados y capaces, que solo han requerido de un mayor apoyo para recuperar a las Ede.