Médico pediatra prestigioso, de capacidad probada. Emprendedor valiente, franco defensor de sus convicciones. Perseverante, apasionado y comprometido especialista; amigo generoso y solidario. Reconocida voz de la Asociación de Clínicas y Hospitales Privados (Andeclip), el doctor Rafael Mena Castro lleva años denunciando distorsiones del mercado de la salud, con énfasis en lo que la clase media comprueba a diario por sí misma: La degradación de la calidad de los servicios, al funcionar la ley 87-01 como negocio a favor de las ARS. Algunos pretenden descalificarlo señalándolo como defensor de “intereses” de su sector. Para determinar quién tiene la razón bastaría con pensar cuál interés –de médicos o de las ARS- sería más cercano al de los pacientes. ¿Y el Estado, cuál interés fomenta?