Para eliminar dudas, suspicacias, especulaciones y en provecho de la transparencia, la Procuraduría haría bien en precisar con detalles y sin posibilidad de exclusión alguna, todo lo referente a los acuerdos a que llegó con algunos de los imputados en el caso Medusa. Esto debe abarcar, tanto a las personas físicas como a las razones sociales que figuraban en el expediente original. Aunque se han avanzado algunos puntos, como el monto del dinero que el Estado recuperará, es necesario conocer en qué esto beneficiará, en término de penalidades, a los imputados que llegaron a acuerdos de delación premiada. Nada de esto puede quedar tras bastidores, pues sentaría un mal precedente.