Nuevo contrato

Por décadas los agobiantes apagones han motivado protesta popular. Ahora la sospecha de corrupción desprestigia el proyecto -Planta Catalina- planteado como su solución a largo plazo. Ejemplo que pone el acento en lo que debiera ser el tema de mayor reflexión del PLD y todos los partidos: Cómo la corrupción ensombrece las actividades desarrollistas, erosiona la esperanza en el futuro, compromete la imagen del país. Hay mayor inversión en educación, la economía crece, están en marcha ejecutorias oficiales valiosas en transporte, vivienda y otras. Pero la indignación ante la corrupción pública alienta la percepción de que todo está perdido, que no avanzamos. Una  atmósfera ciudadana que fomenta ingobernabilidad e incertidumbre. Necesitamos un nuevo contrato social: Alinear efectivamente política y decencia.