Haciendo las cosas de la misma manera siempre, no podemos esperar resultados diferentes. Es la filosofía con la cual debiéramos recibir una idea como la de legalizar la marihuana, que hemos escuchado una vez en voz de Minou Tavarez y ahora del director de Casa Abierta, Radhamés de la Rosa. La tendencia es a legalizar esa droga, establecido que no es muy problemática (la mayoría de los consumidores son recreativos, como explicó de la Rosa) y podría ser incluso menos dañina que cigarrillo y alcohol, que se sabe son adictivos, pero son legales, de lo cual se beneficia el fisco. Entre nosotros estas posturas mayormente reciben rechazo tajante y de plano, pero es algo razonable que debe considerarse sin apasionamiento.