Pese al notable empoderamiento logrado por las dominicanas en los últimos tiempos, todavía somos una sociedad marcadamente sexista. El machismo sigue siendo un fenómeno muy fuerte entre nosotros; se manifiesta día a día, y tiene en los feminicidios su vertiente más extrema. En medio de eso también hay ejemplos como el del salsero Yiyo Sarante, quien proclama orgullosamente que comparte el 50% de las ganancias con su compañera sentimental. Según resaltan relacionados de Sarante, el pujante éxito en su carrera artística y su ascendente popularidad no son cuestión de buena suerte, sino de su desprendimiento y de este tipo de visión y comportamiento personal que no es nada común.

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