Debieron cobrarse RD$55,606 millones en el 2018. DGII y DGA, sin embargo, percibieron RD$33,238 millones. El resto, RD$22,368 millones, el denominado incumplimiento, fue cobrado a compradores y consumidores, pero privatizado por empresas productoras y distribuidoras; evadido por vía de ilícitos tales como el contrabando y la producción informal no registrada; o liberado de los precios de venta ofrecidos por agresivos proveedores a las empresas compradoras, para desplazar a empresas formales y transparentes de algunos nichos de mercado.
Nos referimos al impuesto selectivo al consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillos. En un artículo publicado el pasado 11 de marzo sobre la necesidad de introducir en nuestro país un sistema de Trazabilidad Fiscal para reducir la elevada evasión, fraude e ilícitos en el impuesto selectivo al consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillos, indicamos que el estimado de evasión realizado por Euromonitor, que la situaba en 29.1% ó RD$17,700 millones en el 2017, podría quedarse corto frente a la magnitud real del incumplimiento. En efecto, la DGII ha dado a conocer que el incumplimiento consolidado alcanzó un 40.2% en el 2018, equivalente a RD$22,368 millones. Esto excluye el efecto expansivo que este incumplimiento en el selectivo tiene sobre el incumplimiento de su primo hermano, el Itbis. El estudio realizado por el Equipo Interinstitucional Hacienda-BCRD-MEPyD y publicado en marzo de este año, estima que el incumplimiento del impuesto selectivo alcanza RD$8,981 millones (35.8%) en la cerveza, RD$8,187 millones (39.1%) en los destilados y otras bebidas alcohólicas, y RD$5,199 millones (54.4%) en los cigarrillos.
El pasado lunes, el Director General de Impuestos Internos, dio una muy mala noticia a los adictos, fanáticos y practicantes de la evasión, el fraude y los ilícitos en el mercado de bebidas alcohólicas y cigarrillos. La reputada empresa suiza con presencia global, SIPCA, S.A., resultó ser la seleccionada en la Licitación Pública Internacional (LPI) coordinada y dirigida por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), para seleccionar una empresa con experiencia y reconocimiento global que asumiría el compromiso de establecer un Sistema de Control y Trazabilidad Fiscal (Sistema Tráfico). La LPI dirigida y gestionada por el PNUD, se rigió por las normativas globales de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La Comisión Técnica Evaluadora estuvo conformada por 3 Miembros del PNUD, un experto internacional en trazabilidad fiscal contratado por el Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT) y un miembro de la DGII. La Comisión de Adjudicación estuvo conformada por Mons. Agripino Núñez Collado, en representación de las Iglesias; el rector del INTEC, Dr. Rolando Guzmán, en representación de la Sociedad Civil; y el Director de Acento, Fausto Rosario Adames, en representación de la prensa. Si querían transparencia, ahí la tienen.
El Oferente Adjudicado resultó ser una empresa global fundada en Suiza en 1927: SICPA. S.A., la cual presentó la oferta con el mejor precio relativo por marcación a nivel internacional, con un ahorro de casi 14% sobre el costo inicialmente presupuestado por ese servicio, el cual dotará a la Administración Tributaria del sistema de control y trazabilidad más completo e integral implementado en la región. La empresa ganadora de la LPI, se dedica a proveer productos y servicios de seguridad de impresión, autenticación, y trazabilidad en sectores tales como el financiero, supliendo las tintas de seguridad a la mayor parte del papel moneda que circula en el mundo; la provisión de pasaportes y documentos nacionales de identificación; mecanismos de seguridad y autenticación en los productos farmacéuticos; sistemas de control en la cadena de suministro de combustibles a través de tecnología molecular; y en las industrias de bebidas alcohólicas, no alcohólicas y cigarrillos, instalando y suministrando sistemas de marcación y control fiscal para gobiernos. El año pasado, tuvo la responsabilidad de marcar 80,000 millones de botellas de bebidas y cajetillas de cigarrillos en una buena parte de los 35 países del mundo en los cuales tiene presencia.
No hay que dar muchas vueltas. La LPI dirigida y gestionada por el PNUD a solicitud de la DGII, con la selección de SIPCA, ha colocado al país en muy buenas manos para iniciar esta nueva y posiblemente, muy efectiva etapa para reducir el considerable incumplimiento existente en el impuesto selectivo al consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillos.
El Sistemas de Control y Trazabilidad Fiscal (Sistema Tráfico) que desarrollará e implementará SIPCA, se ejecutará gradualmente, comenzando con el segmento de las bebidas alcohólicas y siguiendo luego con los cigarrillos. Una vez entren en funcionamiento el Sistema Tráfico, se proyecta que el mismo generará, en los primeros 12 meses de vigencia, un aumento de las recaudaciones por concepto de impuestos selectivos al consumo de bebidas alcohólicas y cigarrillos en el rango de RD$3,500 – RD$4,500 millones, para un aumento aproximado de 12%-15% con relación a los niveles de recaudación del 2018.
Estos estimados parecerían conservadores si se tiene en cuenta que el establecimiento de este sistema en otras geografías, ha generado aumentos que 22%, 47% y 53%, como sucedió en Turquía (2007), Marruecos (2011) y Kenia (2014). El pasado 4 de abril, Larry Summers, profesor de la Universidad de Harvard, en un artículo publicado en el Washington Post, criticó las estimaciones de ingresos realizadas por Emmanuel Saez y Gabriel Zucman, ambos de la Universidad de California en Berkeley, que generaría la propuesta del impuesto a la riqueza planteado por Elizabeth Warren. Summers señaló que la prudencia en las estimaciones de aumentos de ingresos fiscales es un activo valioso que generalmente poseen expertos con mucha experiencia en las complejidades y realidades de los sistemas tributarios.
Hace bien la DGII en adoptar una pose conservadora y prudente
El incumplimiento de 40.2% estimado para el 2018, bajaría en los primeros 12 meses de vigencia del Sistema Tráfico, a un rango de 33.9% – 32.1%. Eso excluye el impacto de las rectificativas de los tres años previos que muchas empresas tendrían necesariamente que presentar a la DGII, cuando el Sistema Tráfico revele un incremento fuerte de los volúmenes producidos y transados, no explicable por el crecimiento económico real del período. En los siguientes años, el incumplimiento continuaría bajando en la medida que los controles se vayan perfeccionando y las empresas ponderen mejor la percepción del riesgo de incumplimiento.
Un análisis simple de costo-beneficio revela la razonabilidad y sensatez de ejecutar el Sistema Tráfico. La empresa ganadora de la LPI devengará ingresos anuales que oscilarán entre US$10 y US$12 millones. Cuando esto se contrasta con el aumento de US$70 – US$90 millones en las recaudaciones, se genera una relación beneficio/costo en el rango 5.8 – 9.0. Pocos proyectos y acciones en el ámbito de la Administración Tributaria resultarían más beneficiosos que el Sistema Tráfico a ser ejecutado por SIPCA.
El Director General de Impuestos Internos no sólo dio malas noticias el pasado lunes. Al anunciar la selección de SICPA como la proveedora el Sistema Tráfico, ha enviado una excelente noticia a los consumidores de bebidas alcohólicas. En lo adelante, gracias al Sistema Tráfico, se producirá una reducción en la oferta de bebidas alcohólicas producidas inadecuadamente y adulteradas, que podrían tener efectos nocivos para la salud más allá de los que la ingesta de las producidas adecuadamente pudiese producir. Adicionalmente, el consumidor, cuando pague por un producto, podrá autenticar si un producto cuenta o no con la marcación y si es idéntico al que le aparecerá en su Smartphone cuando la “app” previamente bajada a este último, transmita la imagen. En caso de disparidades, el consumidor tendrá la opción de ingresar al módulo de denuncias anónimas y georreferenciadas, y reportar a la Administración Tributaria la irregularidad. Los consumidores, en la práctica, se convertirán en inspectores muy efectivos y de costo cero en la lucha de la Administración Tributaria contra la evasión, el fraude y los ilícitos.
Otros que escucharon música para sus oídos el pasado lunes, fueron los representantes de las empresas productoras y distribuidoras formales de bebidas alcohólicas y cigarrillos que tributan fielmente todos los impuestos que pagan los consumidores, y que durante años venían quejándose por la existencia de esta competencia desleal. De seguro que, en lo adelante, estarán más dispuestos a acoger favorablemente otro sistema que contribuiría a elevar las recaudaciones que se cobran en medianos y pequeños negocios informales pero que no ingresan a la Administración Tributaria: el Sistema de Agentes de Percepción.