¿Por qué es importante la inteligencia emocional en las parejas?
En el artículo anterior compartíamos, que la relación de pareja se construye mejor sobre el desarrollo de habilidades de inteligencia emocional, cuando cada miembro aprende a reconocer los sentimientos del otro y reconoce la capacidad para manejar situaciones de conflicto y encontrar en común soluciones que funcionen.
Ahora bien, la salud de esas relaciones está cimentada en el autocontrol emocional, cuando reconocemos, entendemos y aceptamos los sentimientos del otro; al tiempo que somos optimistas y desarrollamos la capacidad intelectual para encontrar soluciones para sortear las dificultades que se presentan en la convivencia como pareja.
Dada la heterogeneidad de la vinculación afectiva y el clima de cambios que vivimos, se hace imprescindible hacernos conscientes que la autorregulación emocional es una fortaleza. Muchas personas arrastran del pasado las ideas del vínculo matrimonial tal como lo vivieron sus padres y ancestros, ya sea por motivos culturales o porque así lo perciben. Sin embargo, se debe reconocer que se han establecido nuevas formas de relación que, si bien pueden resultar satisfactorias, también pueden resultar inestables por falta de normas o códigos entre las parejas. Hoy, tanto hombres como mujeres buscan intimidad, compromiso, exigiendo al mismo tiempo espacio privado para su desarrollo personal y esta dicotomía puede conducir a conflictos.
En este caso es muy importante tener inteligencia emocional, para crear nuevas formas de convivencia, que promuevan la independencia, la igualdad, que construyan relaciones afectivas sanas y cumplan con las expectativas de la pareja y cada día se reinventen.
Cuando las parejas comprenden el valor de la inteligencia emocional, la comparten en cada etapa y circunstancias que se les presenta, esto permite funcionar de forma afectiva y efectiva, fortaleciendo así la relación de pareja.