¡Hola, lectores de este espacio “Periodismo y Gramática! Suelo recomendar refrescar sobre la ortografía, pero ahora quiero hacerlo de manera especial con dos signos: el de exclamación (¡!) y el de interrogación (¿?). Ambos tienen similitudes en algunas de las normas establecidas por las Academias y, por eso, la unificación de los dos en este escrito y en otros que encontrarán al indagar al respecto.
Recuerdo que una vez escribí en este espacio “Todo lo que cierra… abrió por algún lado”, para referirme a que, en el caso de estos dos signos, el de exclamación e interrogación, siempre hay una apertura y un cierre, regla que muchos hispanohablantes suelen violentar al colocar solo el que cierra, y así cometen una falta ortográfica.
“A diferencia de lo que ocurre en otras lenguas, los signos de interrogación y exclamación son signos dobles en español, como los paréntesis o los corchetes. Por tanto, es incorrecto prescindir del signo de apertura en los enunciados interrogativos o exclamativos”, explica la RAE en este sentido.
Otra norma importante y que muchos suelen pasar por alto es que, tras el cierre de los signos de exclamación e interrogación, no se coloca punto final.
Una observación importante es la que nos señala que, a diferencia del punto, no ocurre lo mismo con otros signos de puntuación, tal como lo explican las fuentes oficiales al señalar que “sí pueden aparecer, en cambio, otros signos de puntuación —por ejemplo, una coma— si con la interrogación o la exclamación no termina el enunciado”. “¡Espérame!, ¿sí? Estoy acabando”, es un ejemplo que pone de manifiesto lo explicado en el párrafo que antecede a este.
Otro dato que debemos almacenar en nuestra memoria, para embellecer nuestros textos, es que, en el caso del signo de exclamación, este se puede repetir cuando se quiere hacer más énfasis en determinada expresión: “¡¡¡Se lo comió todo!!!”. Anotemos que esta regla no aplica para el signo de interrogación.
Veámoslo más claro en esto que dice la RAE: “Así, si se quiere indicar un incremento en el énfasis exclamativo, es posible repetir dos o tres veces los signos de exclamación, como en este ejemplo de Larra, extraído de uno de sus famosos artículos, titulado La diligencia: “¡Ha ido a París! ¡¡Ha vuelto de París!! ¡¡¡Jesús!!!´”.
Así que espero que hayas tomado nota de estas pinceladas sobre los signos de exclamación e interrogación, para que puedas aplicar dichas normas a la hora de escribir.
¡Gracias por leerme!