Margarita Cedeño estuvo en el Encuentro Multimedios del Caribe y su comparecencia descalificadora contra la actual administración quedó resumida así: “Este gobierno quiere destruir todo lo que está bien”.
Aunque es incómodo discutir con una dama, la falta de mesura y el continente reñido con datos de la realidad, obligan a poner puntos sobre íes. Preguntas.
¿Es “destruir lo que está bien”, designar al frente del ministerio Público a las magistradas Miriam Germán y Yeni Berenice?
¿Es negativo poner fin al reparto político-partidista de las altas cortes y otras instancias de arbitraje social y político?
¿Es destructivo el cumplimiento de la ley 340-06, que no se cumplía en los gobiernos del PLD, y produjo parte de las investigaciones por corrupción?
¿Es malo que Abinader advirtiera que puede tener amigos, pero no cómplices, creando una impronta cero corrupción e impunidad?
¿Es negativo que Luis liderara la aprobación de la Ley de Extinción de Dominio, para recuperar lo robado al pueblo, desestimada en los gobiernos de Margarita?
¿Es lesivo que un tercero independiente como Inés Aizpún testimoniara que “…los precandidatos para el 2024 estaban muy bien situados en el tren del gobierno y/o en la estructura del partido desde hace muchos años como para alegar que no vieron ni oyeron nada…”? Se refiere a los precandidatos Margarita, Abel y Domínguez Brito.
¿Es nocivo que la buena administración del coronavirus llevara a la OMS a felicitar al presidente Abinader por el desempeño de RD?
¿Es calamitoso que, junto al empresariado y al BC, Abinader liderara la estabilidad, recuperación, crecimiento económico y fortalecimiento de la moneda nacional, en medio del estancamiento y la recesión mundial?
¿Es pernicioso duplicar la ayuda social a las personas vulnerables, agregar 300 mil nuevos beneficiarios a esa ayuda, y elevar en dos millones los nuevos afiliados al Senasa?
¿Es perjudicial que Abinader subsidie las alzas de precios de los combustibles para que no encarecieran el transporte de pasajeros y de carga, el comercio, la industria, evitando así más inflación?
¿Es desfavorable dar continuidad de estado a obras públicas de gobiernos anteriores -algunas abandonadas por años-, con gran desperdicio de recursos y retrasos en la prestación de bienes y servicios públicos?
¿Es dañoso, acaso, que asumiendo liderazgo responsable el presidente Abinader esté entregado en cuerpo y alma al trabajo en beneficio del pueblo, y no se deje arrastrar a la inoportuna e ilegal campaña electoral de Leonel Fernández y los precandidatos del PLD?
Qué pena que Margarita no entienda que la descalificación es un discurso más barato que las papeletas de Lilís, y que este país necesita gente como el presidente Abinader y su gobierno, que tiran pa’lante sin mirar patrá.