Siempre que se compra un dispositivo nuevo, existe una teoría que dice que lo recomendable es cargar durante muchas horas el celular por primera vez. Esta creencia tiene algo de verdad para algunos dispositivos tecnológicos, pero con un iPhone esto es completamente incorrecto.
Aunque hay quien piensa que la primera carga del teléfono de Apple debe estar conectado entre 9 y 12 horas, esto es innecesario y por el contrario podría ser perjudicial.
Por eso, Infobae ha preparado este artículo para desmentir los mitos que dicen que si no se carga el teléfono durante mucho tiempo, la duración de la batería podría disminuir.
Al ser baterías de litio, no tienen el efecto memoria. En pocas palabras, significa que se pueden recargar en cualquier momento, logrando cargar un iPhone sin esperar a que la batería se descargue por completo. Estos tipos de batería siempre funcionan para diferentes ciclos de carga.
En este caso, los ciclos siempre terminarán cuando la capacidad de la batería se agote al 100%, pero no después del de una sola carga.
El ejemplo más claro que se aplica es el siguiente: un usuario ha usado el 75% de su carga durante el día, lo normal es que lo cargue por completo durante la noche. En este caso, si se usa un 25% al día siguiente, finalmente se habrá usado una descarga del 100%, lo que eventualmente dará como resultado un ciclo completo.
Cada una de las baterías ha tenido un número determinado de ciclos desde que salió de fábrica. Eso sí, si estos ciclos acaban consumiéndose, la autonomía del dispositivo se verá comprometida.
Este es uno de los factores que se deben saber actualmente para tener en cuenta el estado de la batería, que se muestra dentro del sistema operativo en la aplicación ‘Configuración’ > ‘Batería’ > ‘Condición’.
Pero también hay que tener en cuenta que la batería de Apple siempre está diseñada para conservar hasta el 80% de su capacidad original tras muchos ciclos de carga completa. Asimismo, se integran varios sistemas de protección para limitar siempre la carga al 80% cuando la batería está por encima de la temperatura recomendada. Este es un proceso que siempre tiene como objetivo aumentar la vida útil.
Una vez que se tiene en cuenta toda la información previa, se puede explicar sobre la gestión de la batería como tal. Se ha demostrado que existen muchas diferencias entre las baterías actuales y las que se desarrollaron hace unos años.
En este caso no hay ningún tipo de efecto memoria y por tanto conviene huir de viejos consejos o citas que siempre se pudieron escuchar. Actualmente, las baterías de iones de litio no necesitan cargarse o descargarse por completo de antemano.
Por ende, la primera vez que se conecte un iPhone a la corriente, puede estar las horas que uno quiera. Sobretodo los smartphones de Apple que son de última generación, pues tienen un sistema de batería que, cuando llega al 100%, dejará de pasar corriente al dispositivo.
Eso sí, lo realmente importante es no esperar que el celular se descargue por completo para volver a conectarlo a la corriente. Un ejemplo de intervalos es que el usuario como mínimo dejar que el iPhone tenga 40% de batería, y detener la carga en 90%.
También traemos algunos malos hábitos que pueden agotar la batería de manera muy rápida en el uso que se le da a un iPhone diariamente:
- Cerrar aplicaciones: puede parecer contradictorio, pero cerrar una aplicación gasta la batería de un iPhone.
La razón es muy simple, el sistema guarda una gran parte de la ejecución de la aplicación en la memoria. Por ello, cerrar la app obliga al dispositivo a gastar energía para liberar memoria y, lo más importante, consume batería para restaurarla desde la memoria al iniciar nuevamente la aplicación.
- No utilizar el modo de bajo consumo: con este modo activado, el consumo de iPhone se reducirá significativamente. No usarlo acortará la vida útil de la batería.
Para poder evitarlo, es mejor activarlo tan pronto como se encuentre que la batería no podrá aguantar hasta la próxima carga, pero especialmente si la batería del iPhone cae por debajo del 20 o 10%.