La embajada de la República Popular China celebró en el Hotel Catalonia su “Fiesta del Año Nuevo Chino”, evento que contó con la presencia del ministro de Relaciones Exteriores, Miguel Vargas Maldonado.
La “Fiesta de Primavera”, como también se le conoce a esta tradicional celebración, la cual se realizó por primera vez en el país, luego de establecimiento de las relaciones diplomáticas entre China y República Dominicana, estuvo encabezada por el embajador Zhang Run y su esposa Duan Niyan.
Al dirigirse a los invitados, el diplomático, luego de agradecer su presencia, resaltó que la “Fiesta de Primavera” es la celebración tradicional más importante del pueblo chino, la cual simboliza la reagrupación, la alegría y la esperanza.
En otro orden, dijo que en 2018 China perseveró en el camino de desarrollo acorde con las realidades nacionales propias, y resaltó que su economía logró un crecimiento de 6,6%, mientras el PIB per cápita se acercó a los 10 mil dólares.
“La economía ha demostrado una gran resilencia, potencial y margen de maniobra, contribuyendo con casi el 30 por ciento del crecimiento económico del mundo”, expresó Run, al tiempo que indicó que 2018 “es también un año de desarrollo estable para la República Dominicana, la cual ha logrado un crecimiento económico muy por delante en América Latina y el Caribe”.
Asimismo, consideró que el establecimiento de relaciones diplomáticas liberó el bulto histórico que impedía el avance de las relaciones binacionales y desató gran júbilo de los dos pueblos.
“China y República Dominicana son por igual países en vías de desarrollo y han recorrido trayectorias de desarrollo similares. Es precisamente por eso que apreciamos doblemente un entorno externo estable y seguiremos invariablemente el camino del desarrollo pacífico”, sostuvo Zhang Run.