A la fecha suman 52 años de la fatídica intervención norteamericana en Santo Domingo, que dio al traste con la gloriosa gesta de abril de 1965. A nuestro modo de ver, todo dominicano que tuvo cerca del conflicto quedó impactado, pues, sin duda alguna, es un hecho que marca un antes y un después en la historia de la República Dominicana.
El arte, no quedó exento a este proceso, pues muchos de los artistas enfrentaron al monstruo con sus ideas, plasmando su ira y descontento en las imágenes. El artista Thimo Pimentel no fue la excepción, quien muy joven captó con el lente de su cámara el ambiente que permeaba en el espacio en el que se desarrolló el conflicto.
Mediante un gran trabajo compilatorio y de investigación en el Archivo General de la Nación, la biblioteca Juan Bosch de Funglode, el archivo del periódico elCaribe, colecciones particulares y búsquedas por internet, un equipo en el que destaca la arquitecta Guadalupe Casasnovas (Curadora de la muestra), hoy esas “Memorias y recuerdos de un abril lejano” que recogiera Thimo Pimentel en su momento, son expuestas en el Museo de la Altagracia.
En las piezas exhibidas no solo se aprecia el valor estético de cada imagen, el nivel de detalle captado por el autor, sino también los contrastes en las sensaciones de los personajes ante la intervención. Por un lado, se registra el tanque de guerra, los soldados norteamericanos y, por otro, la imagen de niños que disfrutan de sus paletas de helado mientras se encuentran cercados por alambres de púas.
Cabe destacar que buena parte de las obras constituyen ampliaciones de las páginas de la revista ¡Ahora! donde publicaba Thimo en tiempos de la Revolución de abril de 1965, bajo la dirección del admirado y extinto Dr. Rafael Molina Morillo, por lo que la muestra también deviene en homenaje a la gran labor periodística de éste último.
La exposición puede ser visitada en el Museo de La Altagracia en la Calle Arzobispo Nouel (en los Jardines de La Basílica), Higüey, hasta finales de agosto del 2017.