A propósito de la desaparición del submarino Titán de Oceangate que visitaba las ruinas del Titanic, un capítulo de la popular serie Los Simpson, predijo la desaparición del sumergible en el Océano Atlántico.
Fue en el capítulo 10 de la temporada 17, titulado Homer’s Paternity Coot (El tour del Titanic, en su versión latina) de enero de 2006. En él, Homero se sube a un pequeño submarino y baja hasta las profundidades del océano para buscar un tesoro de las ruinas de un barco hundido.
Tras quedarse solo, el submarino de Homero se queda atrapado. Acto seguido se le enciende el aviso por el oxígeno. Precisamente, el principal problema de la tripulación del Titan, que contaba con 96 horas de oxígeno.
Las “predicciones” de Los Simpsons han ganado la fama de Nostradamus durante sus más de 30 años de historia. Ya predijeron cómo acabaría Juego de Tronos dos años antes del final, adivinaron que Donald Trump iba a llegar a la Casa Blanca, que Disney compraría la Fox, que Lady Gaga actuaría en la Super Bowl, la pandemia de coronavirus o el escándalo de la FIFA.
El gionista de Los Simpson contó su experiencia
Pero esta predicción de Los Simpson va mucho más allá de la pantalla chica. Mike Reiss, productor y guionista de la serie y un habitual en los viajes con OceanGate, participó en 2022 en una de las visitas organizadas por la compañía para visitar el Titanic a cerca de 4.000 metros de profundidad.
Yes, the sub that's gone missing is the same one I took down to the Titanic. I wish everyone involved the best of luck.
For my experiences, listen to my podcast:https://t.co/FI8zxEDa9S pic.twitter.com/PcT8YHXRfx— Mike Reiss (@MikeReissWriter) June 19, 2023
La experiencia, según dijo a CNN, fue totalmente desconcertante “Casi siempre pierdes la comunicación y te encuentras a merced de los elementos”. Reiss explicó que todo el mundo sabe los riesgos que asume al contratar estas expediciones de OceanGate. Según describió, les obligan a firmar un documento en el que “la palabra muerte aparece tres veces en la primera página del contrato” y en el que eximen a la compañía de cualquier responsabilidad en el caso de que se produjera cualquier accidente. “No son unas vacaciones en autocar, algo puede salir mal”, afirmó.