¿Fanático de lo exótico? Si eres un apasionado de los espacios exóticos, con el estilo oriental podrás jugar y darle un aire extravagante a los ambientes y, con ello, revivir la cultura de países asiáticos.
El interiorismo con estilo oriental, con influencias procedentes de Japón o China, e incluso India, sigue conquistando al público amante de lo poco común, de lo diferente… pero elegante. Una de sus ventajas es la facilidad con la que se puede dar un aire oriental a cualquier espacio, desde la cocina hasta el cuarto de baño, pasando por el salón o el dormitorio y, por supuesto, el recibidor.
Para lograrlo, sólo tienes que agregar en tus ambientes algunos detalles que representen a estos países, sin tener que sobrecargarlos.
Por ejemplo, te servirán complementos y adornos, velas decorativas, carteles o fotografías, plantas o jardines japoneses, chinos o indios, etc.
Tonalidades y material más utilizados
En la ornamentación, los matices que se utilizan siempre son importantes para proyectar lo que se desea. En el caso del estilo oriental los colores protagonistas son los cálidos y suaves. Por ejemplo, las tonalidades del estilo oriental suelen ser el blanco y el beige. Asimismo, se suele usar el rojo.
Por otro lado, uno de los materiales más utilizados es la madera, y entre todos los tipos, la de haya es una de los protagonistas.
Detalles
En las mesitas de centro se colocan cojines a su alrededor. Además, los detalles asiáticos en los propios muebles son imprescindibles. Los tiradores y los pequeños detalles suelen ser de color dorado.
Son muchos los complementos que se utilizan para una decoración oriental. Entre ellos, los más utilizados suelen ser los cuadros de estilo asiático o con algún detalle chino, cojines, pequeñas estatuas para decorar, velas, incienso para ambientar, bonsáis, como planta protagonista y las lámparas chinas.