Esta temporada da la bienvenida a materiales con efecto envejecido y a las tonalidades neutras como el blanco, gris y marrón claro
El día 23 de este mes termina el verano y llega el otoño; y con ello, las nuevas tendencias en la decoración de interiores.
El otoño junto a la primavera es la época en que la naturaleza está en su mejor momento en la decoración, es una de las razones por las que los decoradores de interiores recomiendan colocar flores en jarrones con racimos o hierbas secas naturales, para crear un cálido ambiente al interior de tu casa, así como piñas de pino para lograr un ambiente rústico y, a la vez, natural.
Tonalidades
Aunque los colores del otoño siguen siendo el amarillo y el naranja, este año las tendencias marcan una fuerte inclinación hacia los colores neutros. Los decoradores están cada vez más interesados en los tonos blancos, grises y marrones claros.
El secreto detrás de esta tendencia es mantener todos los colores dentro de la misma categoría de tonos. Sin embargo, también se recomienda agregar algunos elementos de color como cojines y alfombras color rojo, naranja, carmín y amarillo, son opciones a considerar.
Materiales
Los decoradores siguen apostando por detalles tipo vintage, como teléfonos, vajillas, candelabros o pequeños muebles. Asimismo, a los cuadros de plantas o las composiciones naturales verticales. Destacarán, la madera natural, un material perfecto para el invierno, por la calidez que aporta, su resistencia y sus posibilidades de combinación con los colores que son tendencia, y que además sigue la senda de esa evocación al bosque que buscan los decoradores durante esta temporada. Igualmente, los muebles y detalles con efecto envejecido o madera cercana al gris serán todo un acierto.
Se sigue llevando el acero, el cristal y los tonos plateados en sillas y diversos muebles. Otro material que está en alza es el granito, que combinará y complementará a los grises. En cuanto a los suelos, volverán a ser tendencia los de piedra en tonos marrones o grises.