Las estrías, el oscurecimiento de la piel, la sudoración y las espinillas son algunos de los problemas que enfrentan las mujeres embarazadas, los cuales se pueden combatir con una alimentación equilibrada, masajes y cremas.
Durante los nueve meses de embarazo, el cuerpo de la mujer experimenta una serie de cambios, explica la cirujana dermatóloga, Lidia González.
En esta etapa, Gónzalez destaca que en la mujer se producen variaciones vasculares, endocrinas, metabólicas e inmunológicas que la hacen susceptible a diversos cambios en la piel. “Estos cambios se deben al aumento de los niveles de estrógenos, por lo que la dermis puede tornarse tersa, lisa, blanda”, comenta la especialista.
Entre los cambios se encuentra la hiperpigmentación (oscurecimiento de un área de la piel, causada por el aumento de melanina), que aparece aproximadamente en el 90 % de los embarazos, dice González. Resalta que ésta puede ser generalizada o localizada en una zona en especial, como el cuello, región genital y línea abdominal.
Otro cambio común en el embarazo, según la dermatóloga, es el melasma, que consiste en una hiperpigmentación asintomática de localización facial(frente, mejillas o labio superior). Se produce debido al aumento de melanina a nivel de la epidermis o la dermis. También, un aumento del índice del crecimiento de las uñas y de la sudoración.
Sin embargo, uno de los problemas más preocupantes en las mujeres embarazadas son las estrías, que salen en los últimos meses de gestación por el estiramiento de la piel.
“Por lo general las estrías no se pueden quitar, pero sí prevenirlas antes de que aparezcan”.
Cuidados de la piel
Entre los cuidados que debe tener una mujer embarazada, está llevar una alimentación equilibrada. “Comer saludable previene el aumento excesivo de peso durante el embarazo, y, por ende, el organismo no somete a la piel a grandes estiramientos”, destaca la especialista.
Una dieta rica en frutas y verduras y beber mucha agua harán que la piel esté bien hidratada desde adentro, mientras que consumir proteína, como la de la carne, el pescado o el pollo, tres o cuatro veces a la semana, estimulará la producción de nuevas fibras musculares, evitando la aparición de la flacidez post-parto.
“Nutriendo y aportando elasticidad a la piel mediante un masaje circular, conseguiremos evitar las estrías o al menos paliar su aspecto. Debes hidratar estas zonas al menos dos veces al día con cremas específicas y que puedas utilizar durante el embarazo”, puntualiza González.
Advierte que el uso de productos cosméticos durante el embarazo es delicado. Las primeras 20 semanas debe ser supervisada por su dermatólogo, ya que existen productos que poseen restricciones, con principios activos que están contraindicados durante este hermoso período.
Es importante hidratar la piel, tanto por dentro como por fuera, tomar líquidos todo el día y controlar el aumento de peso para evitar las estrías.
También hay que prevenir las celulitis, ya que durante el embarazo se tiene más predisposición a que aumenten las que se tienen o sigan apareciendo. Para ello, es necesario evitar la retención de líquidos y los problemas en la circulación.
Asimismo, es recomendable realizarse masajes, con una crema hidratante, o bien con un producto anticelulítico que se pueda utilizar en el embarazo. Realice el masaje con pases circulares ascendentes desde los pies. Insista más en las zonas con acumulación de grasa (parte externa del muslo e interna de la rodilla), mediante pases concéntricos.
Cada día, limpia tu piel y luego aplica mascarillas por unos 10 minutos y luego retira. Debes saber, a la hora de elegir tus cremas, que hay ciertos principios activos contraindicados durante el embarazo: retinol, ácidos, algunos despigmentantes, aceites esenciales y algunas algas, por esto es aconsejable ir donde un especialista.
En el caso de la aparición de manchas oscuras en el embarazo (cloasma gestacional), desde el primer momento en que se detecta el embarazo, debes aplicarte siempre, para salir de casa, protección solar y maquillaje con filtro UVA y UVB.
De igual forma, ten en cuenta que si tu piel tiende a ser grasa es probable que en el primer trimestre del embarazo aparezcan espinillas, debido a que las hormonas estimulan la secreción sebácea. Lo indicado entonces es dormir bien y suficiente, así como alimentarse sin exceso de grasa, ya que de esta forma lucirá un cutis más terso y fresco.
Otros cambios que sufren las embarazadas
No todas las alteraciones de la piel se manifiestan por igual en las mujeres embarazadas, todo dependerá de la genética de cada una. Otros cambios que la mujer puede notar es el aumento de vellos, en las piernas y brazos, lo cual es un problema de hormonas, situación que volverá a la normalidad después que nazca el bebé. Si tienes tendencia a tener pecas, es probable que éstas oscurezcan y se pongan más grandes, esto no es de preocupar, al menos que alguna se torne de forma diferente. Algunas mujeres presentan una alta sudoración; en este caso, los dermatólogos recomiendan tomar una ducha a temperatura tibia, ya que el agua fría estimula la circulación sanguínea, lo que puede causar contracciones uterinas riesgosas en las últimas semanas del embarazo. Para ello, también es recomendable emplear jabón neutro, que no reseque la piel. De igual manera, los especialistas recomiendan consumir alimentos ricos en fibra.