Entre las diversas comunidades hispanas que contribuyen al pulso neoyorquino, los logros de afamados dominicanos emergen con fuerza
NUEVA YORK, EE.UU.- Anótelo y no tenga ni una pizca de duda: La ciudad de Nueva York, con sus más de 18 millones de habitantes e incontables atractivos -entre los que figuran históricos museos, centros de diversión y viejas reservas culturales, no pierde su glamour. Y en el marco de esa realidad, se resalta la presencia -por sus éxitos de alta trascendencia en diferentes áreas- del ciudadano inmigrante hispano.
De igual modo, ya está certificado de acuerdo con creíbles informes ofrecidos por gerentes de hoteles y agencias promotoras turísticas, la gran metrópolis ocupa un lugar de primera fila concerniente a la llegada de turistas de todas partes del mundo…. se incluyen millones de visitantes estadounidenses procedentes de otros estados.
Se afirma, además, que a Nueva York llegan, cada año, entre 52 y 55 millones de turistas. Nueva York se inscribe entre las metrópolis más visitadas en todo el planeta.
Este reportero, en su estancia de poco más de semana, hizo un amplio recorrido por las principales avenidas de la también de la ciudad también bautizada como La Gran Manzana.
La Quinta Avenida, quizás -según observadores- la vía de mayor circulación de peatones y en la que se pueden ver tiendas, restaurantes, cines, salas de teatro y centros de diversión, también es calificada como la vía más emblemática de NY. ¡Ocasiona que la gente quede anonadada de tanta vistosidad, limpieza y atractivos por doquier!
Pero en el discurrir de los peatones, y de un periodista que busca constatar todo el glamour que se puede ver en el Downtown (conocido en español como el Bajo Manhattan), “salta a la vista de todos” el emblemático lugar conocido como Times Square, la zona que “nunca duerme”, y que recibe a miles de parroquianos que se agolpan entusiasmados para disfrutar del histórico espacio.
Sí, el Time Square “enloquece a sus visitantes”
“Si usted viene a esta ciudad, y ya saben que también se conoce como La Capital del Mundo, y no visita, aunque sea por unos treinta minutos una esta zona que conocemos como Times Square, entonces olvídese, que usted no ha venido a Nueva York” , dice con una opinión categórica el ingeniero Evaristo Espinal un ciudadano dominicano que llegó a esta cosmopolita ciudad en febrero de 1987 y a los pocos meses -con pleno dominio del idioma inglés- ya era un eficaz maestro de escuela pública.
Times Square ocupa el gran centro del Downtown, que funciona entre las calles 43 y 44, bordeando la icónica avenida Broadway y la Séptima Avenida. En el verano el Time Square es prácticamente intransitable, pero la gente la disfruta y no se detiene en mantener activos sus teléfonos móviles para tirarse fotos y videos para tenerlos como inolvidables recuerdos.
“Y cuando llega la noche, desde que empieza cerca de las seis y media pasado meridiano, Times Square se pone más atractivo con todo su especial ambiente”, expuso Espinal mirando fijamente el rostro del reportero a quien le hace señas con su dedo índice de la mano derecha todo el rededor del atractivo lugar neoyorquino.
Asimismo, se observa que con sus cosas buenas y malas, ¡pero más buenas que malas!, Nueva York establece “clara diferencia” con las demás metrópolis de todo el orbe. ¡Porque Nueva York e’ Nueva York!, también proclamaría un ferviente habitante neoyorquino.
La realidad es que si usted quiere disfrutar “por todo lo alto”, y más si es verano, entonces desea constantes paseos por Time Square y verá que en ningún otro lugar un turista logra tanta diversión -y sin tener que gastar mucho dinero- que por la referida zona del Bajo Manhattan.
