Lujo, elegancia y gran sofisticación son el signficado de la combinación de estos dos colores en la decoración
Anteriormente muchas personas se rehusaban a pintar sus casas en color negro, sin embargo, en la actualidad es uno de los más demandados para combinar con tonalidades como el dorado y, con ello, crear un ambiente sofisticado. Para lograrlo, hay que tener en cuenta que son dos tonalidades muy fuertes, por lo que se recomienda introducir algún color neutro de transición entre ambos, como el blanco. Como el negro en la decoración ofrece una sensación de oscuridad, elegancia, riesgo y sobriedad, el dorado ayudará a darle el toque de luz. Por ejemplo, uno de los trucos para decorar con el negro, es tratar de incorporarlo en el hogar en pequeños detalles junto al dorado, sea en la ropa de cama, marcos de espejos y cuadros, lámparas u otros objetos.
Si quieres ir más allá de los objetos decorativos, apúntate a la última tendencia y la más arriesgada de todas, las paredes doradas o negras. No hace falta pintar por completo las paredes de la casa, con tan solo una parte es suficiente. Los materiales más utilizados para conseguir paredes doradas es el vinilo, ya que es la más económica y la más fácil de colocar. Por el contrario, otro material es el pan de oro, es una lámina muy fina que se ha utilizado desde tiempos remotos para la decoración y el arte.
Pero si no quieres un espacio tan llamativo y prefieres algo más sencillo, no utilices tantos objetos en estas tonalidades.
Paredes
Las paredes con toques dorados son un gran acierto. En este sentido, existen muchas opciones: cenefas, pinturas metalizadas, papel de pared…
Textiles
Los textiles también son grandes aliados a la hora de mezclar estos dos colores. Hazlo en cojines, alfombras y tapices.
