Iniciamos un nuevo año, 2022, mostrándose a nivel global lleno de interrogantes de qué pasará en el mismo, pronósticos de grandes economistas, sociólogos, pero sobre todo lo que dicen los científicos sobre la salud, la cual se ha visto amenazada, sacudida e impactada como nunca en la historia de la humanidad.
Toda la vida han existido virus, pandemias, pero hoy disponemos de unos medios a través de los cuales en fracción de segundos podemos recibir información del lugar más recóndito del mundo, sabemos a la misma vez por donde anda, cómo se comporta, y lo peor de todo son las publicaciones alarmantes, hasta por los propios medios de comunicación oficiales en todas partes.
Está de más recordar aquellas imágenes que llegaban y penetraban a nosotros de manera audiovisual como es todo hoy, donde las escenas parecían de una película de terror, y hoy vemos y sabemos que aparentemente era otra película en su mayoría.
La finalidad de Por Tu Familia por casi década y media ha sido, es y será preservar, cuidar y proteger la salud mental de los miembros de una familia, donde cada uno influye en el otro de igual forma que cuando hasta el dedo meñique nos duele afecta el cuerpo entero. Esta es un sistema y la base fundamental para que una sociedad funcione o no de forma sana.
Permítanme hacer algunas preguntas: ¿Cómo está tu familia hoy después de todo lo acontecido? ¿Cuáles cosas han salido a la luz internamente que nunca se veían? ¿Se han unido más los lazos por las circunstancias que todo vivido? ¿Has permitido una ruptura por la presión externa de circunstancia que no están bajo tu control y que pueden servir como ente para darnos mayor apoyo en tiempos de tanta ambivalencia? A los padres o tutores, ¿Estás haciendo algo, tu que tienes niños pequeños, para el cuidado de sus emociones y, por ende, el desarrollo de una personalidad sana? Y a ti que tus hijos son jóvenes, adolescentes, ¿Todo lo foráneo que te entra está evitando ver la realidad que ellos están manejando y cómo les afecta?
Nada sucede por casualidad, y los eventos que se han ido desarrollando y se van a desarrollar no sabemos como serán. Importante, como nunca, mantener firmeza de criterios, normas, valores dentro de tu hogar, del cual tenemos la responsabilidad de velar celosamente por su integridad. Familias saneadas generan, aun en crisis, sociedades saneadas.
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios…” (Isaías 41:10)