Si aún eres del grupo que no ha retirado la ornamentación decembrina, aquí encontrarás los pasos a seguir para hacerlo
Para que los adornos navideños te perduren por muchos años debes tener cuidado a la hora de guardarlos, ya que estos son muy frágiles. Para lograr que durante el almacenamiento no se maltraten y se conserven, ten en cuenta los siguientes pasos:
- En primer lugar, limpia los adornos antes de guardarlos, debido a que por su tiempo de exposición acumularon polvo y si no se higienizan se pueden manchar, dañar y adquirir mal olor.
- Para figuras o adornos frágiles, envolverlos individualmente en papel plástico resulta ser una excelente opción para evitar algún daño.
- En cuanto a los ornamentos que tienen escarcha, es recomendable guardarlos en papel de seda para evitar que se esparzan los brillos.
- Para el empaque también puedes usar cajas de cartón o de plástico, según sean tus necesidades. Evita empacarlos todos en la misma caja. No olvides etiquetar los envases para encontrarlos fácilmente la próxima vez que los utilices.
Tipo de envase dependiendo el ornamento
Papel periódico y bolsas de burbujas para envolver las piezas más frágiles antes de ponerlas en cajas.
Cajas de cartón para los adornos más livianos como guirnaldas, muñecos de tela, manteles, entre otros.
Cajas de plástico para objetos pesados y delicados como muñecos de porcelana, bolas de cristal, luces, figuras del pesebre, etc.
Bolsas negras para los ornamentos que no necesitan mayor cuidado como moños, cintas, esferas plásticas…
Luces
Hay varias maneras de almacenar las extensiones de luces del árbol de Navidad para que permanezcan desenredadas. Una de ellas es ir envolviéndolas alrededor del brazo.
