Según una versión, el presidente Joaquín Balaguer fue afectado por la influenza
Actualmente el mundo vive una de las peores crisis sanitarias que se ha registrado en la historia de la humanidad, producto de una pandemia causada por una enfermedad infecciosa de la familia de los coronavirus (COVID-19), originado en Wuhan, China, en diciembre del 2019. Este virus ha causado la muerte de más de 701,000 personas en todo el mundo y fue declarada como alerta de emergencia internacional en marzo pasado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En la República Dominicana, el primer caso que se registró fue de un italiano de 62 años de edad que ingresó al país el 22 de febrero de este 2020, de manera asintomática. Pero siete días después fue reportado como la primera persona que se contagió del virus.
Además del Covid-19, en el país se han registrado varias epidemias y pandemias que han causado estragos, otras no tan graves, como es el caso de la influenza o gripe de Hong Kong de 1968-1970, producida por el H3N2, que se originó en julio de 1968 en aquella nación asiática y que se propagó en varios países del mundo, incluyendo a los Estados Unidos en septiembre de ese año. Mientras que aquí, en el mes octubre, algunos diarios locales publicaron sobre la aparición de una gripe a la que llamaban “rara enfermedad”, que brotó en el municipio de Oviedo, de la provincia Pedernales, donde el 80% de los munícipes habían sido afectados, según había informado el diputado reformista Augusto Féliz Matos de esa localidad.
Atendiendo a esa información, el titular de la Secretaria de Salud y Asistencia Social, (hoy Ministerio), doctor Mario Fernández Mena, dijo que los síntomas que presentaba la “rara enfermedad” bien pudiera ser “La Mafia”, esta era la gripe que en el momento había hecho acto de presencia en el país, con síntomas de dolores en los huesos, fiebres, mareos, vómitos, diarreas y en algunos casos hacía sangrar por la nariz.
Para noviembre de 1968, la República Dominicana se preparaba para un posible brote de la gripe de Hong Kong de 1968, razón por la que el Comité de enfermedades infecto-contagiosas, de la Sociedad Dominicana de Pediatría anunció una serie de medidas para combatir la influenza y explicó que se trababa de “una enfermedad febril, aguda, con dolores musculares y síntomas de inflamación del sistema respiratorio. Se presenta de forma de epidemia en todo el mundo, cada cierto tiempo”. El presidente de la entidad, doctor Sergio R. Incháustegui, recomendó a las personas que fueran afectadas por el virus a acudir al médico y no al vecino, y alertó “no hay vacunas específicas para prevenir la enfermedad, ni para curarla”.
He aquí las recomendaciones anunciadas por la entidad sanitaria que copiamos textualmente:
1- “Las vacunas anteriores contra la influenza, aunque no sean seguras, pueden administrarse a niños con enfermedades crónicas pulmonares, cardiovasculares, renales, metabólicas o neurológicas.
2- “La gamma globulina no es efectiva ni para prevenirla ni para curarla.
3- “Las medidas específicas para los dominicanos son: aire no influye ni el frío tampoco, contrariamente como piensa mucha gente. El aplicarse ungüentos agrava los síntomas, ya que todos irritan las vías respiratorias.
4- “Los antibióticos profilácticos son de sumo peligro, ya que pueden dar lugar a súper-infecciones bacterianas. Es
inevitable contraer la enfermedad, pues se contagia de persona a persona.
5- “Se recomienda a todas las personas que contraigan la influenza, consultar a su médico y no al vecino”.
En ese mismo mes (noviembre), salió publicado en este diario la información de que se estaría adquiriendo una vacuna contra la gripe de Hong Kong-68, en caso de que llegara al país. Sin embargo, antes de comprarla se estaría observando la efectividad de la misma en los Estados Unidos. El secretario de Salud, dejó saber que “cualquier persona que entre al país y se descubra que tiene una enfermedad contagiosa, será aislada inmediatamente”.
El documento, reseña que el país norteamericano estaba combatiendo la propagación de una virulenta gripe asiática denominada 2-Hong-Kong-68, cuyo bacilo fue introducido por diplomáticos y médicos que retornaron de Asia. Una de las preocupaciones que se tenía era que el virus se expandiera a otras partes del mundo, debido a que la enfermedad fue llevada por unos médicos asiáticos a una reunión de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se celebró en septiembre de 1967 en Teherán. Los síntomas que presentaba esa epidemia eran fiebre, dolores musculares, congestión de las vías nasales, dolor de garganta y la sensación de ligera y persistente náusea.
Otra información de diciembre de 1968 explica que numerosos dominicanos provenientes de Nueva York, arribaron al país en ese mes, en la terminal aérea de Punta Caucedo, afectados de la gripe. Según la nota, algunos de los viajeros permanecían alrededor de un minuto tosiendo y con el rostro pálido. Aunque una señora, conforme reseña la publicación, atribuyó el síntoma al cambio de clima. Mientras que otro señor expresó que una cantidad no especificada de dominicanos residentes en esa ciudad norteamericana se encontraban afectados por la enfermedad. Ese pasajero explicó que tuvo que regresar a la República Dominicana para descansar y aprovechar el tiempo para recuperarse del mal epidémico.
En ese mismo mes de diciembre, fue publicado en primera plana en un diario nacional la noticia de que el presidente Joaquín Balaguer se había contagiado de la influenza, con una fiebre de 40 grados, lo que le impedía realizar sus acostumbradas funciones en el Palacio Nacional. En la información no se especificó qué tipo de gripe padeció el mandatario.