Un total de 90,100 niños fueron afectados por la poliomielitis durante la epidemia de 1963
Actualmente se lleva a cabo en el país una jornada de vacunación para contrarrestar el rebrote del virus de la COVID-19 que ha matado a más de 3,600 dominicanos en el territorio nacional desde inicios de la pandemia hasta la actualidad. A propósito de esta campaña de inoculación contra el coronavirus, en la entrega de hoy, reseñamos un programa de vacunación que se vivió en la nación en 1963 producto de un brote del virus de la Polio que afectó a un total de 90,100 niños.
Antecedentes
La prensa de entonces, registra que para el año 1959 el país sufrió un brote de epidemia de la Polio y que años más tarde en 1963 hubo un rebrote del virus, pese a que en marzo de ese año se había realizado una campaña de vacunación a la población infantil.
¿Qué es la poliomielitis?
La Organización panamericana de la Salud (OPS) la define como “una enfermedad altamente contagiosa ocasionada por el virus de la poliomielitis. La gran mayoría de las infecciones por poliovirus no producen síntomas, pero de 5 a 10 de cada 100 personas infectadas con este virus pueden presentar algunos síntomas similares a los de la gripe. En 1 de cada 200 casos el virus destruye partes del sistema nervioso, ocasionando la parálisis permanente en piernas o brazos. Aunque es muy raro, el virus puede atacar las partes del cerebro que ayudan a respirar, lo que puede causar la muerte”.
Jornada de vacunación
La campaña de inmunización a la población infantil inició en la ciudad capital por ser la zona de mayor incidencia de casos de la Polio. El gobierno dominicano coordinó con varios países para obtener la vacuna contra esta enfermedad. El primer lote de vacunas que recibió el país fue proveniente de la isla de Puerto Rico con 6,000 mil dosis de vacunas oral tipo Sabin para el programa de prevención contra el virus. Esa cantidad era parte inicial de un mayor pedido de un millón de vacunas que se había solicitado al extranjero.
Para iniciar con la campaña de vacunación, el Ministerio de Salud Pública y Previsión Social realizó un encuentro con las autoridades de Salud para explicar el procedimiento a seguir para la aplicación de la vacuna.
Durante el acto, el titular de esa cartera, el doctor Samuel Mendoza Moya dijo que “cada tipo de vacuna se aplicaba en dos gotas disueltas en agua de siró, con el fin de que el niño pudiera ingerirlo sin ningún inconveniente y que su uso era mensual hasta lograr la erradicación completa de la enfermedad”. Esta vacuna solo le se suministraría a los niños de hasta seis años.
La vacunación inició el 17 de agosto 1963 en el Centro Sanitario de Santo Domingo, previo a esto, un grupo médico de Puerto Rico y del país asesoró a las enfermeras sobre la manera de usar la nueva vacuna. Los sectores de la capital donde se comenzó la campaña de inoculación fueron Las Cañitas, La Francia, Villa Duarte, ensanche Luperón, ensanche Espaillat, Guachupita, ensanche Molinuevo y calle 10 en Los Minas. Para el 19 de agosto ya habían sido inmunizados con la vacuna Sabin alrededor de 2000 mil niños en el Distrito Nacional.
A finales de agosto del año que nos ocupa, el país recibió una donación de la empresa American Cyanamid Company, de Estados Unidos, de un millón quinientas mil vacunas para inmunizar a 750, 000 niños de la República Dominicana contra la Poliomielitis. Un total de once toneladas de vacunas fueron transportadas por un avión especial de la Pan American World Airways.
Con la llegada al país de ese 1,501.200 vacuna, el martes 27 de agosto de 1963, las autoridades sanitarias del país iniciaron una jornada masiva de vacunación a finales de de ese mes, en la que 119,836 niños entre edades de tres meses a siete años serían inoculados en el Distrito Nacional, se iniciaría en esa zona, por ser la de mayor incidencia de casos del virus. Según un documento periodístico del archivo, para esa fecha, se había registrado 114 casos de niños afectados con la Polio quienes estaban internos en el hospital Moscoso Puello, centro de salud destinado para el internamiento de los pacientes con la enfermedad.
Luego de finalizada la vacunación en la ciudad capital, se siguió con la provincia de San Cristóbal y Peravia y por las demás provincias del sur que era la única región que había sido afectada por la epidemia hasta ese mes de agosto. En las otras regiones no se registraron casos de Polio durante ese mes. Ese plan masivo de vacunación se fue expandiendo por todo el territorio nacional.
La prensa de entonces registró que a finales de agosto de 1963 acudieron unas 500 personas al Centro Sanitario de Santo Domingo para ofrecerse como voluntarias para la campaña nacional de vacunación contra la poliomielitis.
Continuará…